ABISMO

Capítulo 115

Sentía que, aunque todo lo que estaba sucediendo era realmente un desastre lo peor aún estaba por venir, lo sentía y realmente me aterraba, había miles de escenarios en mi mente, estaba pensado demasiado en todo, sólo quería que mis pensamientos se detuvieran, pero eso no sucedía. Realmente algo andaba mal conmigo.

Evan se encontraba sentado en la orilla de la cama liando un cigarrillo y yo me encontraba sentada en una esquina de la habitación con mis piernas pegadas a mi pecho, no sabía de qué manera reaccionar después de lo que había dicho.

Quería llorar, sentía que tenia que hacerlo, pero no hubo nada. Estaba cansada de eso.

Esbocé una pequeña sonrisa cuando escuché que ambos dimos un suspiro al mismo tiempo, él terminó de liar y encendió el cigarrillo para después dar una calada, miré como el humo desapareció y deseé poder desaparecer de esa misma manera, Ya no tenía mas deseos de seguir, sentía que ya no podía hacerlo. Me había estado esforzando por tanto tiempo y estaba demasiado agotada.

— ¿Quieres que terminemos, Eileen?

Encogí los hombros, no importaba, ya nada importaba, no quería que él estuviera cerca para cuando mi vida se arruinara más de lo que ya estaba, pero al mismo tiempo, sabia perfectamente que sin él me iba a encontrar completamente sola y en ese momento era lo que menos quería, no quería estar sola. Realmente ya ni siquiera sabía que era lo que quería para mi vida.

— ¿quieres estar conmigo? —Cuestioné.

Él movió la cabeza aceptando.

—Eres la única persona con la que quiero estar en este jodido mundo. —Respondió.

— ¿Por qué?

—Porque eres tú Eileen, solo por eso quiero estar en todas mis vidas contigo.

— ¿Todas tus vidas?

—Todas mis vidas, cariño.

— ¿Y crees que en una de esa vidas, realmente podamos ser felices? ¿Crees que en una de esas vidas realmente puedas amarme?

Él movió la cabeza aceptando.

—Te amo y también te amaré en todas mis vidas, Eileen.

— ¿Por qué no fue diferente, Evan? ¿Por qué tiene que ser así?

—No lo sé.

— ¿Cuánto tiempo tiene que estar mi hermano ahí?

— Mientras se calma la situación.

— ¿Por qué por él si quieren justicia y para nosotros nunca existió? No creí que eso fuera a pasar, nunca lo imaginé, y sí realmente lo hubiera matado su vida se hubiera arruinado por completo, no es justo.

—No te preocupes, de cualquier forma la clínica le puede ayudar a tu hermano, es una buena clínica, yo estuve ahí. Bueno, esa no es una buena referencia, pero Randy también estuvo ahí.

— ¿has vuelto hablar con él?

— ¿Con quién?

—Con Brandon, estuvo en el hospital el día de tu sobredosis, Omar dijo que estuvo una noche cuidándote.

—Gracias.

— ¿Por qué?

—Por no dejarme morir, eres mi ángel Eileen. Gracias, pero creo que no debiste hacerlo.

— ¿Por qué?

—No debiste.

— ¿Querías que te dejara morir?