Butterfly Effect: The Performance

ESPECIAL STANDREA NRO°5/?

Pov Andrea

-¿iras al estudio? -pregunta con seriedad-.

-¿que más haría? -alce una ceja-.

-pues, no se, solo te la has pasado aquí y ya -rueda los ojos-.

-debe ser, que lo hago porque yo quiero y amor al arte -le di la espalda-.

-¿crees que a mi, no me duele? -golpeo la mesa- solo estas encerrada, mirando tu laptop todo el jodido dia, sin hacer mas que eso, mirando ese maldito negativo, ¿crees que, no duele? -.

-¿¡que demonios hablas, Anastasia?! -le di la cara-.

-jodete, actuas como si nada y me ignoras, me dejas sola, no seas tonta -alzo la voz-.

-lo dice la que vive saliendo, quién sabe con quién, llega borracha y solo se levanta y sale de la casa a hacer su vida como si un hijo no hubiese muerto, eres una imbécil -la enfrente- una insensible -.

-estas loca, no de la buena manera -rie con sarcasmo- no se concebio, ese bebe, por lo tanto, ni existió, ¿quieres que me eche a morir, por eso? ¡Me duele, si! -grita- pero no por eso, debo de actuar como si yo lo hubiese conocido, creeme que me hubiese ido con el, si lo fue...

Bastó escasos segundos para que, mi mano derecha se levantara con fuerza y rapidez, hasta estrellarse contra su mejilla, dejandola roja como sus ojos azules, que me miraban con rabia e impotencia retenida, sus puños estaban apretados con muchisima fuerza a cada lado de sus caderas; se había vuelto una torturosa rutina, todo esto, peleabamos la mayor parte del tiempo cuando nos teníamos cerca o solo nos ignorabamos, o al menos ella si me ignoraba, porque yo solo podia pensar en ella, en nuestro hijo y los planes que se vieron atrofiados por las decisiones del patrón, mientras que, ella salia por las noches y regresaba al dia siguiente, ebria y con olor a cigarro, sabía que sus amigos la acompaban una que otra vez pero...

¿Quien la acompañaba el resto de las veces?

¿Quien estaba ahí, con ella?

¿Quien se la pasaba escribiendole?

Eso, ella no lo entendía para nada.

No entendía el hecho de que a mi me doliera más, no digo que a ella no le duela pero era mi vientre el que lo expulsó y rechazó su procreación, fue mi cuerpo el que no lo permitió y eso me hacía ver todo, sentir todo, de una manera mucho más dolorosa y decepcionante, mas cuando adopto esa mala actitud al dia siguiente en que dijo, no abandonarme, fallando a las horas, por irse a beber y actuar como la Stassie de meses atrás y el despecho, no era excusa, tampoco era excusa de que fuese una cretina e imbécil que no me dijera lo que siente para ayudarnos mutuamente, simplemente no la entendía.

No solo era eso, por otro lado, se encontraba el factor, sonrisa coqueta, cuando tenía el telefono y su desaparición, al tenerme cerca como si me ocultara algo, yo se de esos cuentos, yo conozco esas sonrisas y donde o como las usa, se quien es Stassie, se lo que hablo y espero que no sea así, no se lo perdonaría.

-¿que mie...

-recuerda que, ojo de loca, nunca falla y por algo, estoy donde estoy -amenazo-.

-no tiene sentido lo que dices -acaricia su mejilla-.

-algo me ocultas, detras de estas fiestas y tus borracheras, hay nombre y apellido -me acerque- recuerda algo, Anastasia, me pediste matrimonio, estamos organizando una boda y acabamos de fallar en el intento de tener un hijo y eso, es algo que debes de tomar en cuenta -.

-sigo sin entender -rio nerviosa-.

-sabes de lo que hablo -palmee sus mejillas- camina por la sombra -la fulmine con la mirada-.