Pov Stassie
Es de madrugada, venia con sueño y unas copas demás en mi torrente sanguíneo, quería tomarme un baño, pasara verla a su habitación e irme a dormir. Quería despejar mi mente de las turbulencias que he vivido últimamente, compartiamos casa y eso me gustaba, sin embargo, no era lo mismo, no hablaba de lo carnal, me referia a mi deseo de besarla y sentir sus manos en mi piel.
Luego de su salida del hospital, pelee con mis suegros para poder ser yo, quién cuide de ella y de mi bebe, Eleanor, interrumpió la discusión y expuso las miles de razones por la cual yo soy quién debe de cuidar a ambos, partiendo de que es mi hijo; ellos accedieron y desde hace unos días, atendia sus necesidades de mujer embarazada, desde abrazarla cuando ve el comercial de un medicamento para el estómago y llora, aguantar sus cambios de humor, sostener su cabello cuando vomita y sus asquerosos antojos, al llegar al super mercado, el menos concurrido por la poblacion californiana, ya los de hortalizas y los pasilleros sabían que darme, literalmente iba cada dos horas.
Eso no me molestaba, de hecho amaba experimentar este proceso de su gestación, aun tiene tres semanas pero me enamoraba esto, por otro lado, me sentia incompleta, necesitaba a mi venezolana siendo totalmente mia, no queria actuar como su amiga, como lo estaba haciendo ahora, queria ser su prometida, con quien esperaba a su primer hijo.
Llegue a la casa, venía con el chofer al volante, antes sólo era yo pero ya no, ahora somos ella, el y yo, debia cuidarme, por lo que, el hombre estaciono la camioneta con lentitud y otro escolta me ayudo a bajar de la misma, revolviendo mi estómago con el aire chocando con mi rostro, tome aire repetidas veces y camine hasta la entrada, frunciendo el ceño al ver la luz de la sala encendida a las 4 de la mañana. Entre sin hacer ruido, palpe la mini arma que tenia en mi bolso, por recomendación de la italiana, y camine hasta la sala, notando como mi precioso amor tenía a los perros olisqueando su vientre mientras ella leia algo en su libreta de canciones.
-buenas noches -susurre quitando mis zapatos-.
-querras decir, buenos días -me miro fijamente-.
-si, eso -suspire- ¿que haces despierta a esta hora? -me acerque-.
-no podia dormir -se abrazo a si misma-.
-¿que tanto suena en tu cabeza? -masajee sus pies-.
-saliste tarde, ibas a beber y tenia miedo de que algo te sucediera, no podia dormir por eso, también porque, yo, amm, olvidalo -se puso de pie-.
-dime, por favor -la tome de las manos-.
-queria que me abrazaras mientras dormia -agacho la mirada-.
-vamos, me ducho y entro a la cama contigo -sonrei limpiando sus lagrimas-.
-traeme algo de sabritas con nutella y tomate -hizo pucheros-.
Aunque sentia asco por aquella combinación de alimentos, me sentía sumamente feliz, hice lo que me pidio de antojo y tome rumbo a su habitación, que fue nuestra en alguna ocasión, deje un beso en su frente luego de ver como comia con desespero y fui al baño, tratando de que el agua fría calmara los acelerados latidos de mi corazón, la amo.
Cuando salí, vistiendo una pijama cubierta por el frío, note como me miraba con lágrimas en sus ojos y un visible sentimiento de nostalgia, mordi mi labio inferior mientras caminaba para enrollarla entre mis brazos, dejando que llorase en mi pecho, no sabia si se trataba de nostalgia por los cambios de humor por el embarazo o, no lo se, no me gustaba verla asi.
-mañana tenemos consulta con la ginecóloga -sorbio su nariz-.
-lo se -limpie sus lágrimas- ¿por que lloras? Sabes que no me gustaba verte llorar -.
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Butterfly Effect: The Performance
FanfictionElla es como mi efecto mariposa. Tan maravillosa. Tan dulce. Tan perfecta. Me gusta. Lo mejor de todo... Es mia.