Quédate

Abuelo III

Archivaldo, Joaquín, Andrés y Freddy estaban sentados en la mesa principal de la casa con un papel especial y una pequeña montañita de marihuana seca a su lado.

- Primero hay que comprimirla bien y acomodarla en el papel. - Dijo el señor Joaquín.

Todos se acomodaron mejor con los brazos sobre la mesa haciendo lo que el Sr Joaquín decía.

- Que chilo su abuelo. - Dijo Freddy acomodando bien la marihuana en el pequeño papel.

- También soy tu abuelo. - Dijo el señor Joaquín poniendo su mano sobre el hombro de Freddy.

- Abuelo, ¿por qué lo hacemos en el comedor y no en el patio? Si mi tía Elena se da cuenta de lo que hacíamos nos va a ir de la chingada a todos. - Dijo Andrés.

- Por que esa ramita de ahí vale oro. Y es muy fácil de volar. Si lo hacemos en el patio haremos un desastre. Solo iremos al patio a fumarnoslo. - Dijo el señor Guzmán. - ¡Archivaldo, concéntrate! - Dijo el Sr. Joaquín viendo a Arch pensativo.

- Abuelo, tengo una duda. - Dijo Archivaldo desinteresado haciendo el churro

- Dígame mijo.

- ¿Usted alguna vez conoció a Amado Carrillo?

Andrés y Freddy se miraron de reojo.

- Jejeeee. - Salió una risita burlezca de Joaquín mientras pasaba su lengua por el papel para intentar sellar su cigarro.

- Pues... Hace muchos años hijo, cuando empecé en el negocio.

- ¿Y como se caen?

- Pues no somos los mejores amigos exactamente. De hecho yo mate a un familiar de él, él intento matar a la esposa de Don mayo, al Mayito, me mato a un hermano... Hay mucha sangre derramada.

Archivaldo trago en seco.

- Valió vrga. - Dijo Joaquín

- ¿Que paso, hijo? - Pregunto el Sr. Joaquín

- Esteee... No nada... Es que no cerro bien el churro. — Dijo Joaquín Inocente.

- Deja te ayudo. - Dijo el Sr. Joaquín caminando a Joaquín. Joaquín miraba apenado a su hermano. Sabía que saber eso lo había puesto a pensar.

Pero había algo con lo que Joaquín no contaba. A archivaldo le valía hectáreas  de vrg, que su familia no fuera fan de la familia de Lucia. A él le gustaba y buscaría la forma de estar con ella.

- ¿Por qué lo preguntas Archivaldo? - Pregunto el Sr. Joaquín.

- Nada. - Dijo Archivaldo pasando su lengua por el papel para sellar el churro. Termino de enrollarlo bien y quedó un perfecto cigarro en la mesa.

- Ve nomás este chamaco. ¿Ya sabías verdad?

- Pues había visto a mi apa un par de veces.

- ¡¿Mi apa fuma marihuana?! - Pregunto asombrado Joaquín.

- Cuando estábamos mas chicos... Y a escondidas de mi ama

- Tu papá se hizo un mandilón de primera. Pero en fin. No sé confíen de los Carrillo.

Joaquín se quedó pensando he hizo la pregunto que su hermano no se animaba a preguntar. - ¿Y que pasa si me gusta una ?

- ¿Quien tú? - Pregunto Andrés divertido.

- La Madelyn. - Mintió Joaquín.

- Oiloo. - Dijo Freddy divertido. - Si nomás te la hechaste y jamás volviste a hablarle.

Joaquín tenía ganas de ahorcar a los dos.

- Pues si, pero la mire en una fiesta. Y hablamos y creo que me gustó... Mucho y quiero algo bien con ella... Que crees que proceda ahí abuelo...

- La respuesta es no y no. no confíes en ellos y menos en la viejas.  No sabes si traman algo. Aparte que aunque ella te quiera la familia te puede hacer algo por venganza. O que la nuestra haga algo por impulso. Te la cogiste. Que se quede en eso y ya.

Joaquín miro de reojo a Archivaldo para ver su reacción pero Archivaldo estaba tranquilo. Tomo su cigarro recién hecho y se fue al patio a prenderlo.

Archivaldo llevaba unos minutos afuera ya se sentía más relajado después de unas caladas.

- ¿Cómo te sientes? — Pregunto Joaquín a Arch.

— Bien. — Dijo Arch. Desinteresado.

— Pensé que te afectaría lo que dijo el abuelo.

— Con todo el respeto que se merece el abuelo, no me importa que piense.

— Si te gusta Lucia. — Aseguro Joaquín.

— No se..

— No fue pregunta... Pues está bien. ¿Y ella lo sabe?

— No.

— ¿Y por qué no se lo dices?

— Después.

— Puedes empezar a ser un poco más obvio.

Arch se quedó pensativo.

— Dile al abuelo que vuelvo en un rato. Dijo archivaldo subiéndose a la camioneta. Llegó a una florería y mando unas flores a Lucia con un suero y chilaquiles.

Siguió al repartidor para ver la reacción de ella.

Miraba atento como el repartidor toco la puerta y se sentía muy nervioso.

En eso la puerta se abrió....

Israel abrió la puerta mirando asombrado al repartidor. Tomo las flores y las cosas y agradeció.

Archivaldo estaba asombrado y se sentía estúpido. Era la primera vez que su ego se había herido un poco. Aceleró un par de veces la camioneta y arranco enfriega

"Ni pedo" pensó. "Israel ni me llega a los talones" Pensó también, era mil veces mejor que el pendejo ese.

Llegó a su casa y miro a sus hermanos y su abuelo fumando y riendo en el patio.

Ni quiso llegar se subió directo a su cuarto y se encerró.

Se quitó todo, solo se quedó en boxer e intento dormir.

En eso lo despertó unos golpes en la puerta.

— Arch. Iremos a una fiesta ¿Quieres ir? — Pregunto Joaquín.

— No.

— Vamos hombre.

— No quiero la neta. No ando de humor. — Archivaldo tomo su teléfono y había un mensaje de Lucia. "Gracias" nisiquiera le importo y bloqueo su teléfono nuevamente

— ¿Todo bien?

— Si solo quiero dormir.

Archivaldo se cambió de posición y volvió a dormir.

Cuando volvió a despertar miro su reloj eran las 3 de la mañana se movió algo incómodo y noto que alguien tocaba la puerta despacio.

—Que no voy a salir Joaquín.

— No soy Joaquín. — Dijo una voz apenada