◆FAMILIA AL INSTANTE◆

◆◇яαмÉ у єℓ αятє ∂єℓ кιηтѕυgι◇◆

EXTRA.

  ⚠ Lenguaje soez: palabras obscenas, groserías, insultos, referencias sexuales o frases con intensión de ofender ⚠.

Cuando vean esto ⚠🔥⚠ es porque ahí comienza y, en su caso, termina el contenido +18. 😏

Y otra cosa, este capítulo viene con imágenes 🔥 así que les pido que lo lean con discreción, para que no nos bajen la historia. 🙏🏻

Si no te gusta este tipo de contenido puedes no leerlo, para eso indico en donde comienza y en donde termina. 😉

Ahora si... Disfruten. 😏😉

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Sale de la oficina de su abuelo con un lío en la cabeza.

¿Qué acaba de hacer?.

Definitivamente si Joaquín se entera, le dará todo derecho y libertad de mandarlo a la tumba.

Se merecía un buen golpe en esos momentos. Si tan solo alguien le diera un golpe por tremenda estupidez qué dijo.

—Emil-...

—Maldita sea, no hagas eso— lleva sus manos a su pecho asustado —¿qué pasa, Jorge?.

—Lo siento— se disculpa tapando su boca con una de sus manos —no era mi intención asustarte.

—No te preocupes, estoy bien— respira y se tranquiliza —¿Quieres que hablemos ahora?.

—Eso me gustaría— sonríe tímido.

—Vamos a caminar entonces.

Ambos comienzan a caminar. Emilio se olvida por completo del tema de las nuevas cláusulas, necesita despejarse para poder pensar con claridad.

—¿Por dónde puedo empezar?— rompe el silencio Jorge jugando con sus manos —Todo empezó cuando comencé a trabajar aquí. Yo... empezaré diciendo que... Yo y... David y yo fuimos novios.

—¡¿Qué tú y David qué?!— interroga atónito por la noticia. Jorge y David, jamás lo hubiera pensado —¿Cómo?, ¿Cuándo?... ¿Por qué?.

—S-Si— Jorge río un poco ante la expresión del rizado —Bueno, tú y yo fuimos compañeros desde primaria y nos hicimos amigos cuando yo empece a trabajar para tu abuelo, ¿recuerdas que yo era algo así como su cartero?— Emilio asiente.

Jorge empezó a "trabajar" en la empresa de los Osorio desde que tiene memoria, él quería ayudar a su padre y como este no sabía cómo decirle que no, el señor Alberto amablemente le dio un "trabajo"; empezó llevando las cartas al buzón de la empresa. En sus ratos libres se encargaba de charlar con el pequeño Emilio, claro, hasta que Emilio se mudó a México.

»Bueno, después de que te fuiste— continúa explicando —David comenzó a venir, no sé muy bien para que, pues la señora Martina casi no venía— suspira —Comenzamos a llevarnos mejor hasta que... yo le dije que me gustaba, él al principio no lo tomó ni bien ni mal, simplemente me dijo que tenía que aclarar sus sentimientos. Un mes después, en el cual me había dejado de dirigir la palabra, me confesó que él también sentía algo por mi.

—¿Y fueron novios?— cuestiona curioso el rizado.

—No— ríe sin gracia —él nunca me dijo nada, simplemente nos besábamos y esas cosas. Llegamos a compartir fotos algo comprometedoras, pero nada más. Jamás me dijo nada sobre ser novios o algo parecido. Al menos no hasta que, hace a penas 10 meses me pidió ser su novio, yo feliz le dije que si; pero justo hace una semana, de la nada, él... él dijo que ya no sentía nada por mi, que descubrió que sólo andaba conmigo por costumbre, que sus sentimientos se fueron hace bastante tiempo. Dijo que ya no me quería y que ya ni le importa que pase conmigo.