Luego de largas horas en el avión, finalmente llegan a Viena. Aterrizan en las instalaciones de la empresa del abuelo de Emilio, quien parece ya estar esperándolos con Sergio a un lado.
-¡Abuelito!- grita Eduardo corriendo a abrazar a su abuelo en el instante en el que pone un pie en el suelo.
-Mis nietos, que hermoso tenerlos aquí conmigo- abraza al pequeño levantandolo en brazos -. No tienen idea de cuanto los extrañé.
-¡Abuelo!- grita Axel corriendo hacia su abuelo, quien ya ha bajado a Eduardo de sus brazos.
-Cada vez que te veo te ves más alto- ambos rien aún abrazándose -. Me alegra mucho verlos de nuevo.
-Hola, abuelo, Sergio- saluda Eduardo al padre de Emilio -¿Como estás?
-Yo estoy muy bien, pequeños, feliz de verlos de nuevo- toma ambos niños en brazos y los aprieta en un cálido abrazo.
-Nos alegra volver a verlos- menciona Axel al separarse del abrazo.
-Abue- saluda Emilio llegando con Alberto.
-Príncipe- saluda con un abrazo -. Oh, Joaco, que gusto verte.
-Lo mismo digo, Alberto- corresponde el abrazo que ahora le da el mayor.
-Hola, papá- Emilio abraza a su padre, quien corresponde de inmediato
-Que bueno que estés aquí de nuevo, campeón- sonríe ahora abrazando a Joaquín -, que bueno que estén aquí.
-¿Y mamá?- cuestiona Emilio abrazando a Joaquín.
El clima en Viena se siente algo fresco, el sol apenas comienza a salir, así que no brinda nada de calor.
-Ella está con los demás esperando a que tu abuelo se digne a mostrarnos la casa- mira a su padre quien desvía la mirada hacia el paisaje.
-¿No ha mostrado nada, Alberto?- pregunta Joaquín con una sonrisa.
-No, los estába esperando- responde.
-Pero, si no has mostrado nada de la casa, ¿en donde durmieron?- indaga Emilio con el ceño fruncido, mostrándose bastante confundido.
-Tuvimos que dormir en casa de los padres de Jorge- explica Sergio -tu abuelo no nos dejó dormir adentro de la casa.
-Yo les avisé que no debían llegar antes, que era sorpresa el mostrar la casa- se defiende el mayor jugando con el gorro de la chamarra de Eduardo -. Yo no los obligué a venir antes, el único que me ha hecho caso es Octavio, él llegó hace unos minutos.
-¿Mi abuelito Octavio, también está aquí?- pregunta Axel con sus ojitos brillando.
-Si, está con los demás- responde el mayor.
-¡Vamos, quiero ver a mi otro abuelito!- grita Eduardo tomando la mano de Joaquín, quien tiene al pequeño Francisco en brazos.
-Si, vamos, pero permítanme llevar a mi nieto- pide Sergio extendiendo sus brazos hacia el castaño.
-Por supuesto- le entrega al bebé y toma la manos de Eduardo -vamos con los demás.
-Deja las maletas aquí, príncipe- indica Alberto -en unos momentos las van a llevar, junto con los gatitos.
-Está bien- sonríe al ver la enorme emoción que tiene su abuelo de mostrar su nueva casa.
Entrelaza su mano con la de Joaquín, quien se acurruca más hacia él para poder generar más calor.
-Tienes tus manitas frías- dice Emilio y besa la mano de Joaquín para después meter sus manos unidas al bolsillo de su sudadera para que el castaño pueda sentir un poco de calor.
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◆FAMILIA AL INSTANTE◆
FanfictionEl vínculo que tengo con ellos... Emilio se dio cuenta que una pequeña mentira se puede convertir en lo que, sin saber, siempre necesitó y anheló porque una familia al instante se puede volver lo más importante. ◆Historia totalmente mía. ◇No se p...