Notas de autor

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No se como explicar lo que siento en estos momentos. Tal vez es una mezcla de alivio, alegría, tristeza e incredulidad. Si alguien me hubiese dicho hace tres meses que yo complementaría una historia de 90 capítulos, me hubiese reído en su cara.

Ni en mis sueños más locos me imaginé que este año yo estaría escribiendo, pero aquí estamos. En Lo Profundo del Bosque fue una historia que se me ocurrió de la noche a la mañana. Fue una idea que cada día que pasaba se iba haciendo más fuerte, impulsándome a ponerla en papel(o en la laptop😅).

Por alguna razón que no puedo explicar, me negaba a darle mérito y cabida a lo que mi mente estaba creando; hasta que me rendí a ese sentimiento y me lanceé al vacío. Puedo decir que fue la mejor decisión que pude haber tomado. Dejé que la historia fluyera por sí sola sin estresarme ni forzarme.

Los personajes de Ángel y Micah fueron unos personajes llenos de dolor y trauma. Quería que ambos pudieran sanar el uno al otro, pero también que ambos sanaran por sí mismos. Por más que amemos a una persona, tenemos que amarnos a nosotros mismos primero para poder dar amor a los demás. Su historia de amor fue una que me llenó de emoción y alegría. Al final del día, el amor lo puede todo y el amor que ellos se tienen va más allá de lo físico, es amor que viene del alma.

Su historia está concluída, pero verán más de ellos en el próximo libro el cual se basará en la relación entre Terrence y Mark. Espero que me acompañen.

GRACIAS enormes por leerme. Gracias a mi escritora favorita por inspirarme a no dejar que esta historia se quedara en el olvido. Gracias a mis amigas del grupo de Paz y mis queridas TAC, las cuales siempre han estado ahí impulsándome a seguir. Gracias a todos mis seguidores por tomarse el tiempo de leer esta historia. Nos vemos en el libro dos.

¡Los quiero!

~Ana~

En Lo Profundo del BosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora