Wooyoung ya lo había decidido. Se iba a mudar lejos, muy, muy lejos. Encontraría un pueblo perdido de la mano de dios, con una población de cincuenta habitantes donde él sería el más joven y los abuelitos lo adoptarían y le enseñarían el arte de criar ovejas y hacer queso. Se cambiaría el nombre a Guillermo y nunca nadie sabría de su pasado como Jung Wooyoung. Era el plan perfecto, dejar atrás su vida de adolescente despreocupado para dedicarse al duro trabajo en el campo. Haría las maletas aquella misma noche y dejaría una nota sobre el escritorio en su habitación donde avisaría a sus padres de su nueva aventura. No sabía aún cómo acabaría en dicho pueblo, pero supuso que tenía suficiente dinero en el bolsillo para poder comprarse un billete de bus con dirección a la capital. Desde ahí, le tocaría improvisar. Parecía un desafío demasiado grande para un chico de dieciocho años pero Jung Wooyoung no le temía miedo a nada... Bueno, eso era mentira. Jung Wooyoung sí le tenia miedo a algo. Ese algo era la razón por la que estaba pensando en fugarse al otro lado del planeta. Ese algo era más grande que él, era tal reto que Wooyoung prefería rendirse antes de intentarlo porque era un cobarde y porque tenía dieciocho años y todo grano de arena era una montaña imposible de escalar y el mundo se le iba a caer encima y no, no, tenía que huir y cuidar ovejas y salvar su propio frágil y pequeño corazón de ser roto en ochenta mil pedazos y...
ㅡ¡Wooyoung, cálmate! ㅡChoi San chasqueó los dedos a pocos centímetros de la cara de Wooyoung, interrumpiendo su monólogo catastróficoㅡ. Joder, y luego decís que soy yo el que no se calla nunca...
ㅡEl drama ㅡmurmuró Kang Yeosang y acto seguido abrió la boca para morder un muslo de pollo frito, con una ferocidad impresionante para alguien que se veía tan delicado como él.
Wooyoung se desparramó sobre la mesa, ignorando las protestas de sus dos amigos porque estuvo a punto de tirar los vasos llenos de refrescos y su mano izquierda casi acabó sobre las patatas de Yeosang. Por suerte, su plato llevaba un rato abandonado a un lado. Con la frente pegada a la mesa, Wooyoung escuchó a sus dos amigos suspirando. ¡Qué insensibles eran San y Yeosang, no entendían en absoluto el enorme lío en el que estaba metido Wooyoung!
ㅡWooyo, estás exagerando un montón ㅡdijo Sanㅡ. No tienes que fugarte y convertirte en pastor.
ㅡSobre todo porque estoy seguro de que realmente aún no ha pasado nada y estás entrando en pánico antes de tiempo ㅡañadió Yeosang.
Wooyoung se sentó bien y agarró el vaso con su batido de fresa olvidado y le dio un sorbo largo, mientras fruncía el ceño y miraba a un punto cualquiera entre las cabezas de los otros dos. Podría ser que Yeosang tuviera razón y que todavía no hubiera pasado nada, pero no le iba a dar la satisfacción de saber que estaba de acuerdo con él. Todo estaba en la mente de Wooyoung, que ya se había creado un mundo alterno donde nada le salía bien y era humillado y lloraba por cinco meses seguidos. Y claro, Jung Wooyoung no podía ser humillado y llorar tanto le hincharía la cara y sería incluso mayor la tragedia. Por eso mudarse a un pueblo en mitad de la nada era su única opción, donde no le romperían el corazón y podría ser feliz para siempre haciendo quesos y disfrutando de la tranquilidad.
ㅡEs que no lo entendéis ㅡse quejó.
ㅡCómo vamos a entenderlo si no nos has contado qué te pasa ㅡSan suspiró y le lanzó una patata frita a la frenteㅡ. Te has puesto a hablar de repente sobre mudarte al culo del mundo a criar ovejas sin dar contexto.
Wooyoung agarró la patata frita y la lanzó de nuevo, haciendo reír a San cuando le golpeó en la nariz. Al lado de San, Yeosang resopló y miró a Wooyoung a los ojos, de esa manera que tenía al chico convencido de que su mejor amigo podía escuchar sus pensamientos. Para ser una persona que luchaba constantemente con sus propios sentimientos porque no los entendía, Kang Yeosang tenía un don para saber exactamente qué le pasaba a Wooyoung en cualquier momento. Wooyoung creía que toda la energía y sabiduría que tenía Yeosang la invertía en él y que luego el pobre muchacho se quedaba en blanco a la hora de analizar las cosas que le ocurrían a sí mismo. (Wooyoung decidió en ese instante que aprendería a leer a Yeosang como Yeosang le leía a él, para poder ayudarle a navegar el terrible mundo de la tardía adolescencia-casi adultez. Era lo mínimo que podía hacer).
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Afterglow
Fanfiction✨I will fill your heart with afterglow, afterglow✨ One shots y drabbles de Ateez.