ESPOSA MÁGICA

Capitulo 87 Enfrentamiento

-Lord Diamante ¿Qué fué eso? - preguntó uno de los magos qué custodiaba el lago junto con Diamante.

-Esa sín duda fué la magia del maestro Artemis, creó qué encontró algo y nos está alertando - dijo Diamante.

-¿Y qué hará? - preguntó el mago.

-Yo iré, ustedes quédense resguardando, sí algo pasa vendré de inmediato - dijo Diamante.

Diamante partió hacía la zona dónde había recibido la alerta de Artemis, dejando al cuidado del lago a varios magos de otros países, pero no tenía ni idea de lo qué encontraría, después de varios minutos Diamante llegó a una zona extraña, lleno de arboles, examinó el lugar estando alerta ante cualquier apareció de algún monstruo, Diamante sabía qué debía tener cuidado sí Artemis lo había alertado.

-¡Por los Dioses! ¿Qué es este lugar? Siento muchas presencia de monstruos a los alrededores - Diamante se dijo así mismo.

Diamante vió a alguien sentado mirando una cueva.

-¡Hey tú! ¿Quién eres! - preguntó Diamante sacando su varita.

Cualquier persona era sospechosa, Sammy al escuchar la voz de alguien sólo volteó a mirarlo.

-Otro mago qué viene a molestarme - dijo Sammy en voz baja mientras examinaba con la mirada a Diamante.

-Ah eres tú, yo te conozco, eres el guardia de la princesa Usagi - dijo Diamante.

Diamante guardó du varita, creyendo qué Sammy no representaba ninguna riesgo.

-Tú eres rival para mí - dijo Sammy en voz alta.

-¿Qué?¿De qué estás hablando? - preguntó Diamante.

Sammy no respondió, hace poco había perdido a Lizzy y creía qué la culpa era sólo de los magos, ellos qué sólo protegían a los nobles y ricos, ahora era culpable de alejarlo de la única persona qué la había abierto su corazón.

-Voy a destruir a todos los magos, así tenga qué destruir a todos los países y sumirlo en la oscuridad - dijo Sammy.

Las palabras de Sammy alentaron a Diamante.

-¿Qué está diciendo?¿Dónde está la princesa Lizzy? Dijeron qué cayó al agua contigo - cuestionó Diamante.

-Yo no voy a pelear contigo, no eres rival para mí - volvió a decir Sammy.

-¿Qué? - indagó Diamante.

-Mátenlo - ordenó Sammy con una mirada fría y perdida.

Sammy le dió la espalda y siguió mirando hacía la cueva dónde había tenido retenida a Lizzy, Diamante no entendía lo qué quiso decir hasta qué de la nada, sintió dos poderosas presencia mágicas qué salían del suelo, Diamante sacó su espada para defenderse, sabía qué esa presencia eran de monstruos.

-¡Espera, no te vayas! ¿Dónde está la princesa Lizzy? - preguntó Diamante.

Diamante intentó detenerlo pero los monstruos se interpusieron, eran dos monstruos qué también sostenían espadas.

-¡Háganse a un lado! - gritó Diamante.

Diamante creyó qué cortándoles la cabeza los mataría, pero apenas lo intentó los monstruos sujetaron la espada de diamante, rompiéndola en dos.

-¿Qué? No puede ser - dijo Diamante.

Diamante se apartó enseguida, su única arma de defenderse estaba rota y los monstruos estaban casi intactos, sabía qué sí utilizaba su magia contra ellos no los dañaría, Diamante retrocedió y sín quitar su mirada de Sammy volvió a gritar.