ESPOSA MÁGICA

Capitulo 100 Sospechas

Tanto Sammy cómo Darien lograron sentir la magia de Rubeus y Serena afuera de la ciudad, de inmediato Sammy abrió la dimensión dónde sentía la magia de su madre, pero era demasiada tarde.

-¡Serena!¿Qué pasó? Sentí la magia de Rubeus por unos segundos y...

-Se la llevó Darien, se llevó a Usagi - dijo Serena entre lágrimas - Usagi se ofreció y Rubeus la tomó, yo intenté detenerla pero todo fué tan rápido - agregó Serena.

Darien abrazó a Serena para consolarla, pocos segundos después llegaron Mamoru y Lizzy juntos con los magos.

-¡¿Sammy dónde está Usagi?! - preguntó Mamoru al no verla.

Sammy sólo negó con la cabeza.

-¡No! ¡No otra vez! - gritó Mamoru.

Mamoru se llevó ambas manos en la cabeza, Lizzy qué estaba a su lado, intentó calmarlo acercándose.

-Mamoru por favor - dijo Lizzy.

-¡No!¡Suéltame! - gritó Mamoru.

Mamoru sín darse cuenta empujó a su hermana pero Sammy qué estaba cerca la sostuvo.

-¡Oye cálmate Mamoru! Lizzy no tiene la culpa - exclamó Sammy.

Mamoru miró culpable a su hermana y retrocedió.

-Lo siento Lizzy, lo siento - expresó Mamoru.

-Mamoru, mí hermana se ofreció a ir con Rubeus, mí mamá no pudo evitarlo - dijo Sammy.

-¡No!¿Por qué Usagi iría con él? - preguntó Mamoru buscando una respuesta.

-Lo siento, Rubeus vino con la intención de destruir la ciudad, quise enfrentarlo pero no era oportuno, aún hay gentuza evacuado - se disculpaba Serena casi derrotada.

Mamoru intentó buscar una solución.

-¿Usted puede abrir cualquier dimensión?¿No? ¡Traiga de vuelta a Usagi!¡Es su hija! - exigió Mamoru.

Serena cerró sus ojos al sentir la presión de Mamoru encima pero le era difícil sentirla, Rubeus se había encargado de encerrarla dónde ni Serena pudiera encontrarla.

-Lo siento, pero no siento la magia de mí hija - dijo Serena.

Mamoru sintió desesperado con cada minuto qué pasaba.

-Debo ir de vuelta al lugar dónde mí padre - mencionó Mamoru.

-Mamoru cálmate - dijo Sammy.

-¡No! Sammy tú puedes llevarme ahí ¡Vamos hazlo! ¡Es tu hermana! ¿ No querrás qué algo le pase?¿No? - cuestionó Mamoru.

-Quiero salvar a mí hermana, pero sí mí mamá no pudo es posible qué tampoco podamos nosotros, no es tan fácil y lo sabés - dijo Sammy.

Mamoru miró a todos, también estaban tristes pero sabía qué Rubeus no sería tan descuidado cómo la primera vez.

-Todos ustedes ¡No entienden! - gritó Mamoru furioso.

Mamoru se dió la vuelta y regreso a su habitación sín decir ni una palabra más.

-Mamoru - murmuró Lizzy.

-Será mejor dejarlo sólo Lizzy, sólo espero qué ese maldito no le haga nada a mí hermana hasta qué lo enfrentemos - dijo Sammy.

Sammy ayudó a Lizzy a regresar mientras Serena y Darien hicieron lo mismo, esa fué una noche extraña, se preparaban para atacar a Rubeus en el lago, pero él había aparecido antes con la intensión de destruir la ciudad.