ESPOSA MÁGICA

Capitulo 102 Tiempo De Elegir

-Marcus, gracias por todo, quiero qué sigas siendo el escudo de los demás - dijo Serenity.

Esas fueron sus últimas palabras y una sonrisa, eso fué todo antes de qué muriera y no la volviera a ver miles de años después.

-Diosa Serenity, no estoy seguro sí cumplí con tus expectativas, pero aún sigo siendo el escudo qué usted quiso qué fuera, y seguiré siéndolo para proteger su sonrisa - expresó Marcus.

Mientras Marcus miraba la aterrada cara de Serena, recordaba a la Diosa qué le había dado la oportunidad de cambiar su vida, mientras Sammy aún sostenía la espada qué atravesaba el cuerpo de Marcus.

-Sammy, hijo - dijo Serena.

Serena sabía qué ese ataque no le había dañado a Marcus, pero su hijo ignoraba ese detalle.

-Sammy por favor, espero qué sepas lo qué estás haciendo - dijo Marcus.

Marcus cayó el piso con la espada, le costaba trabajo mantener la respiración además de tener un dolor inmenso en su cuerpo, Sammy retrocedió al verlo sangrar, le pareció extraño qué su magia se mantuviera pero prefirió pensar qué era por la fortaleza qué Marcus tenía.

-Bien, muy bien, Supongo qué los humanos tienen un tiempo corto de vida y es normal para ellos - comentó Rubeus.

-Ya hice lo qué me dijiste, ahora enséñame a utilizar esa magia - dijo Sammy.

-Tranquilo niño, todo a su tiempo - respondió Rubeus.

Rubeus miró a Serena con una sonrisa triunfante.

-Esperemos a qué los monstruos destruyan las demás ciudades, no creó qué tarden mucho - dijo Rubeus.

Sammy se dió cuenta qué los monstruos qué habían salido del lago se esparcía por todos lados, podía sentir una gran cantidad de ellos acercarse a la ciudad de sus padres.

-Espero qué esto salga bien y las barreras sean lo suficientemente fuertes para resistir a los monstruos - Sammy se dijo así mismo.

Sammy miraba a Marcus, qué aún estaba tirado sosteniendo su espada.

-Espera qué Marcus pueda resistir también - pensó Sammy.

Mientras Sammy seguía pensando en todo, Rubeus intentó encerrar a Serena y a Darien pero Diamante apareció por medio de la dimensión, y cortó la burbuja qué mantenía encerrada a Serena.

-¿Estás bien Serena? - preguntó Diamante.

-Lo estoy Diamante, gracias pero me preocupa Darien, esa vara en su hombro le está quitando su magia muy rápido - expresó Serena.

-Entiendo, debemos quitársela - dijo Diamante.

-Sí, pero deja qué yo lo haga - agregó Serena.

-Está bien pero creó que Rubeus no dejará qué te acerques - comentó Diamante.

Diamante y Serena se levantaron, Rubeus los miraba desafiantes junto a Sammy.

-Otro estorbo más ¿Cuántos magos tengo qué matar para qué me dejen en paz? - preguntó Rubeus.

Rubeus apuntó a Diamante con su mano e intentó dañarlo, pero Serena se puso en medio.

-¡Ya basta! ¿Cuánto más daño tienes qué hacer tú para estar satisfecho?¿Eh? - cuestionó Serena.

-Sólo estaré satisfecho hasta ver todo destruido Serenity, y está dentro de eso - dijo Rubeus.

Serena miró a su hijo qué de inmediato agacha su cabeza, no podía verla a los ojos.