The Chosen Ones (capítulos 205 en adelante)

Parte 222

Shiia siguiendo las palabras de Kyoko, acepto fácilmente que lo que Ritsuko le había dicho estaba mal.

-Ya veo. Entonces... ¡Lo siento, Alisa! ¿Podrías perdonarme?

-Sí, no te preocupes. No fue tu culpa-respondió Alisa con una sonrisa-.

(Parece que Ritsuko no cambio mucho... huh)

A pesar de que ella tenía 23 años su comportamiento era como el de una niña. Por ese mismo motivo nunca tuvo un novio... y no parece que vaya a cambiar.

-Oigan... ¿Podrían dejar de abrazarme? Es cansador...

-Uuuh (x2)

-Gracias.

Alisa empezó a mirar a sus alrededores.

-¿Pasa algo, Alisa?-pregunto Shiia-.

-Ah... no, no pasa nada...

(¿En dónde están las armas de destrucción masiva que menciono Mai?)

Al no ver nada raro, probablemente ella pensó que Mai le había dicho una mentira solo para divertirse.

-¿Hmm? Está muy oscuro aquí dentro, voy a prender la luz-dijo Kyoko y luego se dio vuelta-.

-¡Espera, Kyoko! ¿Si haces eso no molestaras a ella? Ya sabes... que le gusta estar con la luz apagada...-dijo Shiia con una expresión que parecía estar preocupada por algún motivo-.

(¿Ella?)

-Sigh... ya va siendo momento de que se levante, aparte, Alisa la tiene que conocer.

Kyoko se fue hacia el escritorio, para la vista de las demás era un poco difícil verla.

-¿Ella...?-pregunto Alisa-.

-Oh... bueno, para ponértelo en pocas palabras, ella se ganó el respeto de Ritsuko-respondió Suzuka-.

-Entonces... ustedes ¿No son respetadas por Ritsuko?

-Huh... ciertamente me exprese mal. Como decirlo... Ritsuko es buena con todas nosotras, nunca nos trató mal ni nada por el estilo, pero... con ella es como si Ritsuko la admirara o algo por el estilo.

-No lo entendí muy bien... pero cuando la vea espero poder entender a qué te refieres.

-¡Si! En el momento en el que la veas vas a entenderlo-dijo Mai uniéndose a la conversación-.

Kyoko todavía no había encendido la luz, se podía escuchar cada vez que estaba buscando en el escritorio para poder encender la lámpara que estaba sobre él.

En un momento el ruido paro dando a entender que había encontrado la lámpara y la luz se prendido.

-Para que lo sepas, ella es mi hermana...-dijo Kyoko-.

-¿Eh? Entonces deben ser parecidas...

En ese momento, en la cara de Suzuka, Mai y Shiia aparecieron unas sonrisas burlonas que iban dirigidas hacia Kyoko que estaba mirándolas y tímidamente agacho su mirada.

-¿Huh? ¿Dije algo malo?

-No, no-dijo Kyoko haciendo señas con las manos-. Es solo... que no somos tan parecidas, por varias razones.

-¡Por muchas razones!-grito Mai casi sonando como si se estuviera burlando-.

Kyoko se acercó al colchón y flexionando sus rodillas, se agacho y puso sus manos sobre sus rodillas, mientras que las demás miraban.

Ahora con la luz encendida se podía ver que había un pequeño televisor delante del colchón a unos cinco pasos. Y una consola portátil tirada en el suelo cerca del colchón. En el escritorio estaba el control remoto del televisor.

Allí estaba ella, la última chica a la cual Alisa tenía que conocer y que se ganó la admiración de Ritsuko.

Ella estaba cubierta con una manta hasta la cabeza, no se le podía ver ninguna parte del cuerpo e incluso era difícil darse cuenta si le estaba dando la espalda a los demás o no.

-Oye... despierta... ya es momento para que te levantes.

-.....-no hubo respuesta-.

Todas las demás chicas ya estaban detrás de Kyoko.

-No parece que va a despertar...-dijo Suzuka-.

No había señal alguna de que fuera a despertar.

-Sigh... esto es lo que pasa cuando duerme más de 12 horas, es casi imposible de despertarla...

-¡¿Mas de 12 horas?!-grito Alisa sorprendida mientras que para las demás ya escuchar y ver eso era normal, Kyoko parecía cansada-.

-Sí, ciertamente mi hermana es una persona muy perezosa... pero hay una forma de despertarla a cualquier hora y en cualquier momento.

Nadie pregunto.

Ella continúo hablando.