Parte 254

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-Realmente... eso fue aterrador.

-S-sí, ni siquiera yo logre hacer que Emi se enojara tanto.

-N-n-nunca había visto algo como eso... por otro lado... ¡¿Cómo que mi pequeña hermana ya no tiene esperanzas?!

Los tres que parecían estar paralizados del miedo al haber presenciado el enojo de las demás con sus propios ojos estaban un poco más alejado de la fogata.

Y delante de ellos estaban las demás a excepción de Akira, estaban muy pegadas entre sí, desanimadas con una terrible expresión en sus rostros.

-Con que así son las cosas... uhh... no tengo esperanzas...-dijo Sayumi mirando el tamaño de sus pechos con sus manos cercas-.

Ella apoyo su cabeza en el hombro de Emi.

-Deberíamos haberlo golpeado un poco más...

Emi se quedó con la mirada hacia abajo, lamentándose.

-Entonces... ¿Soy linda pero si mis pechos son pequeños no sirvo? No entiendo...

Kurisu estaba con los ojos bien abiertos como si hubiera pasado toda la noche despierta. Ella se encontraba tratando de entender lo que había dicho Neah aunque...

A su lado se encontraba Ayase con una mano en su mentón, pensativa.

-¿Qué diablos significa "Meh"? ¿Sera algo bueno... o malo?

(Parece que eso les afecto demasiado... parecen gatos)-pensó Fiamma mientras trataba de no mirarlas demasiado, temiendo por su vida-.

-Um... ¿Akira? ¿No estás un poquito lejos?

-¿Huh? No sé de qué hablas...

Neah tenía algunas marcas en su rostro en forma de puño que indicaba que había sido fuertemente golpeado y si no escapaba, probablemente ahora seguirían golpeándolo. Y gracias a la intervención de Akira lo perdonaron... de alguna manera.

Ahora mismo, los dos estaban justo donde se había roto la espada de Neah, Origen. Aunque Akira estaba tomando cierta distancia. Los dos se encontraban agachados y él estaba sosteniendo la empuñadura de la espada.

-Esto puede repararse ¿Cierto?

-No, no creo que pueda repararse. Supongo que no hay nadie con el nivel para repararla.

Neah soltó la empuñadura dejándola caer en los pedazos rotos de la hoja. Y con su mano derecha arranco una parte de su pantalón roto.

-Ah, ¿Podrías traerme algo de ropa? Elige cualquier cosa.

-¿Ehh? Ya veo... eso es lo único que puede hacer una niña como yo...

Se levantó y se fue caminando, deprimida. Neah no le dio importancia a lo que había dicho Akira.

-Ah.

Miro hacia atrás para ver si alguien lo estaba mirando, nadie lo miraba. Metió su mano en el bolsillo derecho, donde estaba la carta que le dio Izanami, la que le dio Fiamma y el dado. Dejo las dos cartas en el suelo y se quedó mirando el dado mientras lo sostenía.

(¿Para qué demonios servirá esto?)

El suspiro y dejo el dado en el suelo. Agarro la parte del pantalón que había arrancado y lo estiro, dejándolo en el suelo. Agarro la empuñadura y la puso sobre el "trapo" y de esa forma hizo lo mismo con los pedazos rotos de la espada.

-Bien.

Miro a sus alrededores para ver si quedaba alguna parte de la espada y no quedaba nada. Nuevamente agarro el dado y lo puso también ahí.

The Chosen Ones (capítulos 205 en adelante)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora