The Chosen Ones (capítulos 205 en adelante)

Parte 242

El tiempo paso muy rápido y ni siquiera se dieron de la cantidad de distancia que había recorrido. Pero, había algo más importante...

La fría noche había llegado.

Iluminados por la luz de la luna en medio de la nada. ¿Algo peor podía haber?

Y por no decir que el agua estaba igual de fría que la noche.

-Parece que no fue tan buena idea...-dijo Neah-.

Todos se agruparon en el medio del agua mirando a sus alrededores.

-¡¿Alguien ve algo?!-grito Fiamma con desesperación-.

¿Se veía algo? No, por más que se la pasen viendo a sus alrededores, solo podían ver la niebla que cada vez iba aumentando. Y si miraban hacia atrás, ya en la isla que habían aparecido no se podía ver.

Realmente estaban en medio de la nada.

No parecían estar tan desesperados ante esta situación, aunque estaban temblando y sus labios se estaban tornando de un color morado.

-No se queden quietos, sigamos avanzando. No podemos quedarnos quietos en una situación como esta, sigamos.

-¡Neah, espera! ¡¿Estás loco?!-grito Ayase-.

-¿Huh? ¿Cuál es el problema? No podemos quedarnos aquí hasta el amanecer. El seguir o quedarnos aquí, es lo mismo... el tiempo no va a pasar más rápido ni tampoco vamos a dejar de temblar por el frio.

-Sí, pero... de noche no vamos a poder hacer mucho...

Ayase parecía que iba a decir algo más, pero no lo dijo.

-Yo creo que Neah tiene razón. Quedándonos quietos no vamos a hacer nada y el tiempo no va a pasar-dijo Hiro-.

Neah los miro a todos con una sonrisa.

-Vamos, mientras más rápido, mejor.

Salvo Neah, Hiro y por supuesto que Akira. Los demás tenían dudas sobre si seguir avanzando o no sea lo correcto.

En algún momento la niebla iba a expandirse más y empeoraría la visión de todos.

Ellos avanzaron nadando todos juntos sin separarse, hubiera sido realmente malo si alguno se separaba.

El frio se fue intensificando, ellos lo sentían en cada parte de su cuerpo pero, no podían detenerse. Siguieron y siguieron nadando.

El amanecer llego, el sol apenas estaba saliendo y eso era suficiente para mejorar la visión de todos. Aun había niebla, pero gracias al sol, era insignificante.

El agua ya no era tan profunda pero cubría la parte inferior del cuerpo.

Se detuvieron.

-Esto ya me está empezando a preocupar... -dijo Fiamma-.

-Akira, tú ya que formaste parte de los 10 reyes, deberías haber estado en todos los mundos ¿Cierto?

-Si-respondió sorprendida ante la pregunta de Eiki-.

-¿Por qué no encontramos ninguna isla aparte de la otra?

-No lo sé. No es como si hubiera estado en cada lugar, pero... esto es realmente malo. Algunas personas decían que por lo general en las islas se encontraban algunos monstruos realmente fuertes que no salen de la isla.

-Parece que vamos a tener que seguir nadando...-añadió Emi desanimada-.

-No (x2)

Las dos personas que habían negado las palabras de Emi, eran Neah y Fiamma estaban un poco más adelantado que los demás y ambos señalando con sus dedos índices hacia delante dijeron:

-Allí hay una isla (x2)

El agua con suerte le llegaba hasta la cintura a ambos. Ya estaban cerca de una isla y el agua había bajado... entonces...

Ellos caminaron hacia delante, ya no hacía falta tener que nadar. Sus pies se encontraban en el suelo.

Debido a que avanzaron no pudieron dejar hablar a los demás que con apuro y cansancio se dirigieron hacia delante.

Y finalmente...

La isla se veía con claridad, una enorme isla. La niebla ya no estaba.

De alguna forma, los demás habían alcanzado a Neah y Fiamma. Ahora mismo se encontraban apenas saliendo del agua que llegaba a sus talones.

La ropa de todas estaba mojada y pegadas a su cuerpo, lo cual era molesto. El cabello de todos que obviamente estaba mojado estaba sobre sus caras.

Caminaban exactamente igual que un zombi.

Totalmente cansados y desanimados, con ganas de tirarse a la arena para descansar de una vez.

Sus pies tocaron la arena dejando atrás al agua y las gotas de agua recorriendo en cada parte del cuerpo de cada uno.

Sus expresiones eran como.... ¿Cómo se sentirían después de nadar probablemente más de 12 horas, con frio y niebla?

-Maestro... tengo un mal presentimiento...-murmuro Akira-.

Oh y de alguna forma había logrado traer la valija con ella.