-Maestro... hay cosas que no debes decir... como se te ocurrió decir eso.
-¡Pero no quise decirlo de esa forma! Quise decir que eres algo como... muy mimada.
-¡¡Eso lo hace aun peor!! ¡Cómo vas a decir eso!
Neah aun sintiendo dolor en su estómago, intento recuperarse y sentarse. Después de intentarlo, se quedó sentando en la cama con una mano sobre su estómago.
-Pero... ¿No dijiste que querías que te preste más atención? Es decir que quieres ser mimada ¿No?
Ella desvió la mirada, avergonzada por las palabras de Neah. Pero, básicamente eso era lo que ella quería, aunque no se esperaba que él lo diga de esa forma.
-N-n-no es así... no lo digas de esa forma, i-idiota.
Él sonrió, aun sintiéndose con dolor forzó una sonrisa.
-Sabes... no hace falta que te pongas así, si eso es lo que quieres, puedo hacerlo. Y la próxima vez, intenta no golpearme tan fuerte, por favor.
Ella enseguida se acercó a Neah preocupada por el golpe que ella misma le había dado.
-¿Huh? Lo siento... no me di cuenta.
Akira coloco su mano en el estómago de Neah cerca de la de él y empezó a mover su mano.
-Con esto... sanaras más rápido.
Por supuesto que no estaba usando magia de curación o algo por el estilo.
-S-si...-dijo Neah mirando el rostro de Akira.
Después de unos minutos, ella retiro su mano y se quedó mirando a Neah. El inmediatamente se recostó en la cama dejando salir un suspiro.
Akira se quedó mirándolo... y caminando como un gato se acercó a él y se puso a dormir justo a su lado.
Ella agarro el brazo izquierdo de Neah para usarlo como almohada. Mientras que el, la miraba y no parecía importarle.
-....
-....
Varios minutos después.
Él se despertó y observo la cara de Akira mientras dormía.
-Realmente... parece una niña.
Lentamente saco su brazo izquierdo y puso la almohada para no despertarla. Él se levantó de la cama y se quedó mirándola.
-Aunque es como una niña... no parece una. ¿Cuántos años tendrá? Parece ser un poco más alta que Sayumi... huh.
Sin querer darle más vuelta al asunto y seguir pensando en eso, él se fue afuera y dejo a Akira durmiendo plácidamente mientras abrazaba la almohada.
Él se encontraba afuera dando una vuelta con su espada en manos y las marcas rojas que esta vez llegaban hasta su codo.
Miro a sus alrededores.
-Realmente... este lugar quedo hecho un desastre.
Levanto su espada a la altura de su cara y se quedó mirándola. Se podía ver que la espada tenía varias grietas, cosa que preocupo a Neah.
-Espero que no se vaya a romper... bueno, después de todo es una espada sagrada debería aguantar esto ¿No?...
Luego de deambular por un largo rato en el lugar con su espada en manos, decidió volver. Guardo su espada y antes de volver... fue hacia donde Ayase estaba entrando. Él no sabía en qué parte exacta ella entreno pero al ver los escombros con cortes, era obvio.
No estaba muy lejos de la casa, estaba casi enfrente.
-Oh... con que estuvo entrando aquí...
Había todo tipos de cortes en los escombros. Neah miro por un rato y volvió a la casa.
Ya una vez dentro de la casa.
-Oh... Akira, despertaste.
Ella estaba sentada en el sofá con las piernas cruzadas y brazos cruzados, esperándolo.
-¿Huh? ¿Pasa algo?-pregunto Neah mientras se acercaba-.
-¿Por qué no me despertaste? ¿Qué estabas haciendo?
Neah se sentó en el sofá al lado de Akira, recostándose y dejo salir un largo suspiro.
-Ah... solo estaba caminando. No te desperté, porque parecía que querías dormir un poco más, además eres muy linda cuando duermes... ¿Lo sabias?
Ella se quedó mirando fijamente a su maestro con su cara roja.
-¡¿Qué?! ¡No lo digas! ¡¿Y cómo voy a saber eso?!
-Haha.
-¡No te rías!
-¿Eeeh? ¿Por qué? ¿Te molesta que diga cosas como esas?
Ella seguía con su rostro rojo. Era inusual verla así, por lo general es muy tranquila, pero no está acostumbrada a palabras como esas y Neah parecía divertirse.
-¡No es que no me guste! ¡Pero! ¡¡Que digas cosas como esas hacen mi rostro se ponga totalmente roja y que mi corazón se debilite!!
-Huh, pero realmente me gusta verte así... por cierto, como que están tardando mucho ¿No crees?
-Ah, es cierto ¿Deberíamos haber ido con ellos?
-No, seguramente hubiera sido una pérdida de tiempo. Solo estoy preocupado porque pensé que iban a tardar menos, solo eso.
-Ya veo, visto de otra manera... estas aburrido y por eso te pones a pensar en eso ¿No? Si no estuvieras aburrido no pensarías en cuanto se están tardando ¿Cierto?
Justo en el blanco.
Ella tenía razón, él había pensado en eso porque no tenía otra cosa en la cual pensar.
-Me pregunto... como llegaste a pensar en eso, pero, tienes razón.
Se levantó del sofá de un pequeño salto y con una sonrisa en su rostro se señaló a ella misma.
-¡Tranquilo! ¡Yo tengo una idea para divertirnos! Confía en mí.
Él no sabía bien por qué pero por algún motivo, se sintió preocupado al escuchar eso... se podía ver en su rostro. Se quedó mirándola mientras sonreía con preocupación.
-C-confió en ti, Akira.
-¡Bien! ¡Lo tengo!-grito con emoción mientras apretaba su puño-.
Él no podía dejar de estar preocupado ante la intensa emoción de Akira, algo le decía que debía estarlo.
Una especie de portal del tamaño de Akira apareció a su lado. Repentinamente, se escuchó el sonido de una explosión y la sala se llenó de humo.
-¡Cof! ¡Cof! ¡¿Qué paso?!-grito Neah-.
El humo se desvaneció y Neah solo dijo "¿Eh?" confundido.
La persona que tenía enfrente era Akira y a la vez no.
Su cuerpo era el de una mujer mayor entre los 30 años o tal vez más, estaba un poco más alta y sus pechos habían crecido significativamente, su expresión era más madura y sexy. Ahora mismo, estaba en ropa interior negra.
-Em... ¿Quién eres tú?-pregunto Neah señalándola con el dedo, mientras le caían un par de gotas de sudor por su rostro-. ¿Dónde está Akira? ¿Qué paso con ella?
-¿Es en serio, maestro?
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The Chosen Ones (capítulos 205 en adelante)
Science FictionEn esta "parte" de la novela, van a estar los capítulos del 205 hacia delante. No sabia que en Wattpad había un limite para publicar capítulos.