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CAMILA
Lauren llevó su mano a mi cabello y lo colocó tras de mi oreja, no dejaba de mirar mis labios y con eso me provocaba una necesidad inmensas de besarla, pero conteniendome me mordí el labio inferior, es lo único que podía hacer.
No dejamos de mirarnos y segundos después entendí que su comportamiento estos días hacía mi solo era necesidad, exactamente como la que yo sentía ahora. Sus palabras me sacaron de mis pensamientos.

-Tienes unos ojos tan lindos Camila. Dijo y mis corazón se disparó. No sabía que responderle, es decir, ella debía mirar los suyos los míos eran comunes en cambio los suyos tenían un color particular. Cuando intente decirle algo ella hablo de nuevo. -Y tus labios son tan tentadores...yo, si tu pudieras ver lo que yo veo me comprenderías. Dejó mi cabello y llegó hasta mi labio inferior el cual acarició con su pulgar. Ella debía poner más atención a su cara frente al espejo. -Tus mejillas están enrojecidas.
Dijo sonriendo y yo respondí alejandome tratando de recomponerme y de pronto fingí que las flores eran mucho más atractivas que ella. Me avergoncé tanto que seguramente ahora no solo mis mejillas estaban rojas, ahora toda mi cara. -Eres hermosa. Dijo y de alguna forma se acomodó en la banca para estar más cerca de mi. Su mano tomó las mías, ambas sobre una de mis piernas y ella adoptó una postura frente al lateral de mi cuerpo. -No se si son las flores o tu pero hueles tan lindo. Dios ya no soportaba más lo que me decía quería lanzarme a sus brazos ahora y besarla pero no era el tiempo aún necesitabamos hablar. Miré hacia la ventana donde Ki trató de ocultarse, nos estaba espiando y me apenaba más que me viera en esa situación, aun necesitaba hablar con el, ya no era tan pequeño y lo que menos necesitaba era confundir sus ideas antes de que llegara a la pubertad. Me di cuenta del juego de Lauren, cuando quisó hablar de nuevo la detuvé.
-Lauren ya basta se lo que tratas de hacer. Me pusé de pie y crucé mis brazos. Ella se rió de ni actitud.

-Vale ya me descubriste, solo miramé ¿Si?
Yo hice lo que me pidió.
-Quiero intentar algo contigo pero entiendo que primero necesito tu confianza y desde luego el interés.

-Yo también lo quiero pero por favor debemos ir lento y ser cuidadosa, no mires pero ahora Ki no esta espiando desde la ventana.
Lauren abrió los ojos sorprendida y comenzó a ponerse nerviosa.

-Tienes razón...yo me disculpo...dios no pensé en eso, no quiero que Ki termine odiandome.
Me giré hacia ella y tomé su mano.

-Hey tranquila no es para tanto, en realidad el tiene intenciones malévolas con nosostras, me refieró a que le conviene que tu y yo seamos cercanas así el podrá pasar más tiempo contigo y no creo que te odie.

-Pero debe estar confundido ahora, debemos actuar diferente frente a el o...
La interrumpí de nuevo.

-No es necesario que sea tan severo, el lo sabe, tuve una charla larga con el hace tiempo sobre las relaciones entre personas del mismo sexo así que no creo que sea tanto problema, pero si en cuanto a la rapidez de nuestra... Dije apuntandola a ella y luego a mi sin saber que teniamos realmente.

-Relación no oficial. Dijo Lauren por mi y ambas reímos. Yo asentí con la cabeza mientrás trataba de no mirarla a los ojos.

-Solo hablaré con el para aclarar su dudas, por eso debemos llevar esto con calma, no puedo garantizarle a el que tu y yo. De nuevo no supé como definirlo. Solté un suspiro largo.

-Esta bien Camila, además de que un día terminaré en un interrogatorio, el te cuida demasiado y...bueno son cosas entre nosotros.
Su respuesta me causó intriga, ¿Qué hablaban sobre mi Kilian y Lauren? ¿A caso ella ya le había contado algo sobre sus intenciones?

LAUREN
El entrecejo de Camila me señaló que mis respuestas la había hecho dudar. No quería contarle nada sobre los interrogatorios en los que Ki me había hecho pensar en que sabía sobre mis sentimientos por ella. No ahora. Ki y yo teníamos una amistad lo suficientemente fuerte como para tratar de sobre llevar mis intenciones con su madre. Aunque por un momento sus palabras sobre que necesitaba hablar con el me hicieron dudar, Kilian era demasiado inteligente.
Respiré hondo para tranquilizarme, ~Llevalo con calma Lauren~ Me repetí en la cabeza, mientrás ella se acercaba a mi para besar mi mejilla con ternura, yo respondí cerrando mis ojos y respirando su dulce aroma. Ella se alejó para darle cuidado a algunas plantas.

Lo que no se ve Donde viven las historias. Descúbrelo ahora