Lo que no se ve

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CAMILA
Minutos después me encontraba frente  a Ki, ambos sentados en el comedor. El tomaba un poco de leche y yo solo movía mis dedos con ansiedad.
-¿Nos viste cierto? Le pregunté insegura cuando ya no soporté el silencio.
-Si. Dijo sin más y me miró fijamente.
-Bueno ¿Y no quieres preguntar algo?
-Si, ¿Tu quiéres a Lauren?
Dios, siempre era tan directo me daba miedo confesar algo así a mi hijo. Se suponía que yo debía estar con su padre, como una familia pero aquí estaba haciendo más dificil la situación, quería a alguien más que no era su padre además de que se trataba de una chica, nuestra vecina.
-Si Ki, escucha yo se que esto debe hacerte sentir enfadado o quizás..
-No estoy enfadado mamá. Dijo en tono serio y bebió más de su vaso.
-¿Entonces?
-No se supongo que no entiendo del todo que significa eso. Se encogió de hombros de nuevo.
Claro era aún muy pequeño como para comprender la situación.
-Pues eso significa que quiero estar cerca de ella, lo que te comenté sobre la atracción Ki.
-¿Te gusta?
-Si. Le contesté.
-Yo creo que lo entiendo.
-¿Te gusta una niña? Le pregunté enfadada el era aún mi bebe no podía sentir ya esas cosas.
-No, pero alguien trató de explicarmé...y mamá tu puedes tener una novia, yo no te lo prohibiré.
Dijo con voz de adulto y saltó de su silla para correr a abrir la puerta que sonaba con insistencia, debía ser Lauren.
Salí de mis pensamientos al sentir los pasos trás de mi.
-Voy a ver televisión mientrás saludas a mamá. Escuché las palabras de Ki hacia Lauren por un segundos, ¿Así que ella era la persona que le había explicado todo? Me sentía tan tonta ellos practicamente me habían tendido una trampa.

LAUREN
Toqué la puerta algo ansiosa, necesitaba besarla de nuevo, aunque el baño solo me habia separado de ella casi 40 minutos. Ki abrió la puerta con una sonrisa grande, me dió un abrazo y me agaché para estar a su altura.
-Mamá lo confesó. Me dijo y chocamos las cinco. Entre ambos sabiamos que ocurriría pero jamás me imagine que le llevaría tan poco tiempo a Ki, era realmente bueno, por un tiempo pensé que ella pensaría demasiado su respuesta solo por ser razonable con su hijo pero ahora ya no importaba.
Ki me guió dentro y me dejó frente a la cocina. Me empujó para que me acercará a Camila.
-Hola. Ella se pusó de pie y siguió dandomé la espalda, su actitud me confundió. -Supongo que necesitas ayuda con la cena. Dije pero siguió sin mirarme.
-¿Qué le dijiste a Ki?
-¿Cómo, ahorita o?
-No finjas se que hablaron sobre mi, no soy tonta.
Sus palabras me sorprendieron y por insitinto miré hacia donde el pequeño. ¿Le había dicho sobre lo que platicabamos cuando me visitaba?
-No entiendo.
-Pues ya ve entendiendo, utilizaste a mi hijo ¿Para qué? Me miró por fin. -Sabes a lo que me refieró.
Metí mis manos a la chaqueta y traté de acercarme pero levantó una mano indicandome que no lo hiciera.
-Cam...
-Te aprovechaste de la inocencia de Ki y ¿Qué haces le sacas información sobre mi?
Yo negué por un tiempo con la cabeza mientrás buscaba las palabras adecuadas para explicarle, cuando intentó pasar de mi la detuve junto a la puerta. Hablé en tono bajo.
-Que no nos escuche Kilian. Dije en susurró y ella tuvo la intención de gritarme pero coloqué mi palma sobre su boca para evitarla emitir un sonido.
-Camila no lo utilize por dios, el fue quien se dió cuenta incluso antes que nosotras. Quité cuidadosa la mano de su boca.
-¿A qué te refieres? Me dijo empujandomé.
-A que el me interrogó hace semanas, el notó como te miraba embobada y eso de dejarnos solas por más tiempo solo fue su idea yo no intervine hasta que se lo pregunté y dijo sin pena que intentaba acercarnos por que el sabía que tu eras feliz al tenerme cerca, de verdad no se de donde lo sacó pero no me importa ahora, funcionó y el es un chico realmente listo, igual que tu Cami, se parecé a ti, no te enojes conmigo ahora. Terminé la explicación apresurada para evitar que quisiera gritarme de cosas.
Tapó su cara por segundos y luego clavó sus ojos en los mios.
-Dios es que me a puesto tan nerviosa, solo para que le dijera lo que sentía por ti. Yo solo sonreí.
-Ya lo sé, me lo acaba de decir en la puerta.
-Debo reprenderlo no esta bien que lo haga. Dijo tratando de avanzar a la sala.
-No Camila, venga finalmente lo logró, yo opinó que deberiamos aprovechar la oportunidad que nos dió para estae juntas.
Uní su frente con la mía como hace una hora lo había hecho en el jardín ella cerro los ojos y yo la seguí.
-Creo que ya fue suficiente. La voz de Ki nos hizo saltar distanciandonos. Ella soltó un suspiró y luego camino a la encimera donde comenzó a preparar la cena. Ki me miró divertido y le ayudamos a su mamá.