GUERRA DE CLANES

CAPÍTULO 31: COMPROMISO.

– ¡Shikamaru, voy a ser papá! – Gritó abriendo la puerta de su oficina después de que Sasuke lo hubiera despertado electrocutandolo con un chidori por desmayarse.

– ¡Felicidades! – Se escuchó el eco de varias voces.

Todos sus amigos habían hecho una fiesta sorpresa, con globos y serpentinas.

– Te dije que te esperaría algo grande cuando regresaran. Felicidades, Naruto, Sasuke. – Felicitó el Nara.

– ¡Chicos, voy a ser papá! – Volvió a gritar el rubio.

Al parecer esa la única frase que sabía.

– Lo sabemos, creo que el único que no lo sabía eras tú, Naruto. – Fastidió Sakura, pero calló al ver al rubio acercarse a ella sin nada de espacio personal – ¿Q-Que?

– Sakura-chan, ¡VOY A SER PAPÁ-TTEBAYO! – Sonrió él Chico.

Deidara se acercó a Sasuke quien se había dirigido a la mesa de bocadillos.

– Creo que está en shock de felicidad. – Opinó.

– Es un Usuratonkachi, déjalo ser. – Restó importancia el vampiro sirviéndose un plato de tomates.

– ¿Ya viste quien está a punto de bajarlo de su nube? – Preguntó dándole la suficiente curiosidad para girarse.

Itachi Uchiha caminó entre las personas hasta llegar al líder bestia.

– Maldición. – Pensó Sasuke.

– ¡Itachi, vas a ser tío-ttebayo! — Anunció el rubio en cuanto lo vió.

– Eso ya lo sé. – Respondió el Uchiha mayor. – Claro que tenemos que arreglar algunos asuntos, como sabes, Sasuke ya no podrá hacer actividades pesadas y también está la cuestión de que su hijo será un Híbrido, por lo cual debe desarrollarse en un ambiente adecuando para él.

– Si, si, lo entiendo. – Concordaba el rubio.

– Así que pienso que deberían casarse.– Termino de decir Itachi.

Sasuke y Deidara escupieron el agua que tomaban.

– Ya lo había pensado cuñado, estoy completa de acuerdo contigo-ttebayo, lo más pronto posible...

– ¡DETENGANSE LOS DOS! – Gritó el chico que desprendía una amenazante aura eléctrica por todo su cuerpo. – ¡Yo jamás accedí a casarme con nadie!

– Pero...teme, ya tengo todo listo.

– No Naruto, no nos vamos a casar por el simple y sencillo hecho de que este esperando un hijo tuyo. – No quería casarse sólo por eso, no por conveniencia ni obligación.

Naruto lo entendió. Comenzó a caminar lentamente hacia Sasuke, aquél que emanaba aura asesina. Aún cuando todos sus amigos veían la escena, lo tomó de la mano al momento en que rápidamente más de mil voltios recorrieron su cuerpo electrocutandolo.

– N-no es por obligación S-si eso es lo que piensas. – Intentó calmarlo, pero solo sentía la electricidad aumentar. – ¡Agh! ¿¡Sh-shikamaru? tienes lo que te pedí que cuidaras cuando me fuí?

– Si viejo. – Dijo el semidios acercándose cuidadosamente para que Sasuke no lo terminara electrocutando también, y dándole la bolsita azúl a su dueño.– Creí que la necesitarías.

– Gr-Gracias... – Con dificultad, el Uzumaki  desenvolvió el nudo sacando el contenido de la bolsa. – C-cariño, enserio no puedo hablar cuando estás electrocutandome, Gracias. – Sasuke se detuvo. – Te lo dije cuando estabamos en el bosque, el día que te conocí supe que serías con quién compartiría mi vida.