Es la vida que elegí y es la vida que quiero pasar por el resto de mis días. Afortunada de haber sido elegida por el futbol, ya que desde pequeña tenía el deseo de jugar para los colores de mi equipo y lo disfruto como si fuera el último día. El futbol para muchos puede ser "correr tras un balón y tirar a una portería" pero para los que vivimos todo el día en una cancha ya sea en entrenamientos o partidos lo vemos diferente, es olvidar los problemas, cuando estoy enojada, cuando estoy desesperada, cuando estoy triste y sin duda cuando estoy feliz. Vivir en la cancha y de visita a la casa. Es sarcasmo.El partido esta reñido, estamos a unos cuantos minutos para que acabé y vamos empatadas, un gol de la capitana y un gol de Alejandra, no nos quedaremos con las ganas de ganar nuestro primer partido.
Rebeca me habló con la mirada que bajara mientras ella hacía sus jugadas de su lado hasta que se acercará iba a ser el momento del pase. Ví que se les dificultó un poco y tuve que acercarme ignorando las indicaciones que había dado la capi. Me dio el pase bombeado Rebeca y me lleve el balón antes de que me acorralaran se la pase a Denisse, hicimos triángulo, ella se la pasó a Daniela y seguido a mí para tirar como llegara y anoté...gol, ¡GOL!
Corrí hacia la esquina de la cancha, mis compañeras me seguían y sin pensarlo comencé el festejo bailando mientras giraba, un festejo a lo Pizarro, entre los gritos y mis compañeras aplaudían ese momento fue mi favorito.-¡Venga _____!-escuché desde la tribuna.
-Muy bien _____-mis compañeras estaban tan felices que terminamos en un abrazo grupal.
Último minuto y termine con el marcador final tres a dos. Nos acercamos con las jugadoras de tuzos y le dimos la mano como es al terminar un partido. Me adelanté a los vestidores porque el Director Técnico nos habló
-¡Excelente juego!-
-Gracias, el equipo que hacemos es impresionante-ya estaban por llegar todas.
-Bien, chicas felicitaciones, su primer partido ganado y espero verlas con esta actitud hasta el final. No me equivoqué al elegirlas- terminamos aplaudiendo y preparando nuestras cosas para regresar a nuestra ciudad.
-Ale, adelantate y separa lugar, porfavor-Eramos las últimas en los vestidores.
-Si, ¿te ayudo en algo?-
-No, estoy bien, gracias- se fue, quedandome sola.
-Que buen festejo-escuché detrás de mí.
-Oh, gracias, me inspiraste-sonreí.
-Lo bailas mejor que yo, tengo que admitirlo-
-No, eso si que no-hubo risillas.
-¿Es la primera vez que lo bailas?-
-Sí, nunca estuvo en mi mente festejar así pero meter el gol hizo que lo bailara inconcientemente-
-Por cierto, me encanta como juegas-dedicó una sonrisa.
-Tu tampoco te quedas atrás, y es un honor que me lo diga un jugador de excelencia-
-Si se arman unas retas-dijo pensativo.
-Claro, pon fecha, lugar y hora-
-Pizarro, ya vamos a jugar-asomó la cabeza Chuky-Hey, hola, la número cinco.
-Hola-dije amigable y me saludo de mano.
-Vimos tu festejo y definitivamente lo bailas mejor que este cabrón-reímos-Apuráte Rodo.
-Me tengo que ir, pero quedamos con las retas-
-Me avisas, te paso m...-me interrumpió dandome un abrazo y se fue retirando cuando grito a lo lejos.
-¡Yo te busco! ¡Me encantó verte!-
¿Enserio esta pasando esto? Los jugadores de tuzos me conocen como la número cinco.
-Uy ¿Porqué te tardaste?-dijo Ale cuando me senté a su lado-¿Te perdiste?-
Sonreí a medias-Sólo platicaba-
-Rodolfo Pizarro-hizo una tonadita muy rara.
-¿Cómo supiste?-
-Yo iba saliendo y él apenas entrando, es lógica-
Entré a mi instagram y vi fotos en las que estaba etiquetada y elegí una para luego postearla y seguido poner como descripción:"Buen juego el de hoy, gracias por su apoyo. Esto apenas comienza." Guardé mi celular y me acomodé para una larga siesta que pienso disfrutar.
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MILLION REASONS
RandomHay un juez llamado tiempo y el pondrá todo en su lugar. Ella tiene un millón de razones para irse, pero sólo necesita una para quedarse.