Capítulo 48. "Ese Rodolfo ya no existe"

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-Creí que no vendrías-entro Eva a la cocina buscandola.

-No te iba a quedar mal-Dijo Fabiana al tomar un sorbo de su vino.

-Solo pase a recordarte lo que tienes que hacer-dijo Eva.

-Todo lo que sea por ti-guiño el ojo y salió de la cocina dejando sola a Eva.

-¿Puedo saber ahora que estas tramando?-apareció Isaac quedando frente a frente.

-No se de que hablas-se hizo tonta tomando de su cerveza.

-Cada día te conozco más, eres el diablo en persona-la escaneó con su mirada.

-Me conoces de pies a cabeza, mi amor, o ¿te lo recuerdo?-mordió su labio inferior.

-Ahorita no me das ganas-esquivaba sus caricias.

-Te lo pierdes-deslizó su mano por su hombro mientras se alejaba.

-Eva...Eva-suspiro fuertemente de la desesperación.

-Tu no entiendes, ¿cierto?-lo miré-Solo te esta usando.

-Te equivocas Jair, yo la estoy usando, solo me sirve para una cosa-palmeo su espalda y él negó con la cabeza.

Los violínes se comenzaron a escuchar fuera de la casa y las trompetas no se quedaron atrás, seguido una voz los acompañaba al cantar, Uriel ayudó en abrir la puerta para que los mariachis pasaran, pues la casa era amplia así que no había nada que impidiera su acceso.

Celebremos señores con gusto

Este día de placer tan dichoso

Que tu santo te encuentre gustoso

Y tranquilo tu fiel corazón.

Rapidamente algunos sacaron su celular y comenzaron a grabar, otros disfrutaban del momento y Rodolfo realmente sorprendido sin dejar de sonreír camina hacia la sala con manos en bolsa, quedando frente a frente a ellos.

Vive vive feliz en el mundo

Sin que nadie perturbe tu mente

Y pondremos un laurel en tu frente

Con el oro y las conchas del mar.

Fabiana con una cajita de color blanco se coloca junto al mariachi y comienza a cantar.

Nerviosa y feliz a la vez pues era la primera vez que cantaba frente a personas y más importante llevarle serenata a un hombre. Pero nadie le quita el pensamiento que se lo está ganando.

Celebremos señores con gusto

Este día de placer tan dichoso

Que tu santo te encuentre gustoso

Y tranquilo tu fiel corazón.

Solamente un recuerdo ha quedado

De la infancia que al fin ya pasó

Celebremos tu día tan dichoso

Tus amigos parientes y yo.

Durante la melodía Pizarro se la pasó pensando en sí abrazarla o solo decirle gracias pues sabía que todo movimiento quedaría grabado por todas esas camaras que no dejaban de presionarlo.

Su cuerpo respondió a lo que en verdad tenía que hacer, agradecerle de ante mano y un brazo por tremenda sorpresa de llevarle "gallo" como dicen en el pueblo. Aplausos se hicieron presentes, Uriel solo sonreía al ver a su hermano siendo feliz, pensando que ___ no esta en su mente en ese momento, pero ambos sabían que debió de salir ___ cantando.

No importa donde esté y con quién, ella siempre estará presente.

___.

-¿Ya elegiste el lugar para las próximas vacaciones?-dijo colocando la carta sobre la mesa.

-Si-dije emocionada y seguido coloque la carta en medio.

-¿Riviera Maya?-preguntó.

-No, ¿Porque Riviera Maya?-pregunte divertida.

-Porque yo quiero ir y un día iremos-dijo Erick seguro-Deja de hacerla de emoción y dime a ¿donde iras?

-Oporto-sonreí y él alzo las cejas de sorpresa.

-¿Qué haras hasta allá y luego sin mí?-

-Esa es la idea, desaparecer un ratito de aquí-guiñé el ojo.

-Cuando se habla de otros lugares solo pienso en equipos de futbol. ¿Iras de paso al Porto FC?

-Tal vez, puede ser, aún no he hecho la lista-me detuve a observar el más minimo detalle de mis cartas-Siento que allá encontraré el amor de mi vida.

No faltó su burla y rodeando los ojos me hizo saber que estaba loca.

-Si, claro y yo me caso mañana-ambos reímos.

El juego de cartas uno se ha vuelto parte de nuestro fin de semana o en algunas ocasiones destrezarnos. Pizza y cervezas nos acompañan esta tarde mientras le ganó a Erick por no utilizar bien sus cartas.

Rodolfo.

-Oye no era necesario que vinieras-se acercó Pizarro a un lado de ella alejandosé del grupo.

-Lo sé, solo quería darte compañía-bebió de su copa y el sonrió a medias.

-¿También es parte del contrato ser linda conmigo?-al escucharlo ella sonrió.

-No, esa siempre he sido yo.

-Gracias, Fabi, aunque este sea un contrato, hiciste de mi cumpleaños el mejor-con pena me acerque a ella y logre iniciar el abrazo al cual ella correspondió.

-Vaya, aquel Rodolfo de la terminal no hubiera hecho esto.

-Ese Rodolfo ya no existe-Me acerqué a ella  despacio y tomé su mentón con mis dedos para acercarla a mi boca. Ella sin pensarlo pasó sus manos por mi cuello e iniciamos un suave y calido beso, nuestros labios se movían lentamente escuchando nuestras respiraciones.


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