Mi Discípulo murió una vez más

Capítulo 139: ¿Tengo que ser así de Desafortunada?

Esa mujer parecía estar herida, ya que se había desmayado en el suelo. Su respiración era muy débil, y parecía como si estuviera en su último aliento. Viendo esto, Zhu Yao sintió ganas de darle una patada.

Pero esta persona seguramente era bastante capaz. Aunque estaba herida, la absorción de energía divina en su cuerpo no se detuvo, como si estuviera usando instintivamente la energía divina para restaurar los meridianos dañados en su cuerpo.

Esto no era una buena señal.

—¿Qué tipo de hongo es este? —el hongo curiosamente dio vueltas alrededor de la mujer varias veces—. Se ve muy extraño, mucho más extraño que un espíritu roca.

—Esto no es un hongo —corrigió Zhu Yao. En sus ojos, ¿todo en el mundo eran hongos?— Ella es una practicante divina.

—¿Divina? ¿Ella también se ha convertido en una deidad? —el hongo estaba un poco emocionado.

—Mn —¿No era este el Reino Divino? Todos deberían ser deidades, ¿verdad?

El hongo una vez más observó a esa mujer inconsciente en el suelo, solo para revelar una mirada de desprecio.

—Ella se ve muy fea. Ella tiene colores variados en ella, y no es tan bella como yo en lo más mínimo.

¿Qué colores variados?

Lo que está usando es ropa, ¿de acuerdo?

Para que un humano sea despreciado por un hongo, Zhu Yao se quedó sin palabras.

—Es mejor que nos demos prisa y nos vayamos —insistió Zhu Yao.

Aunque ella no sabía por qué esa persona se había caído hasta aquí, ella no podía garantizar que esa mujer no se percataría de la verdad después de ver su cuerpo de jade cuando se despierte. Como un jade inmóvil, y un hongo el cual poseía un poder de combate de cero, ellos definitivamente no eran sus oponentes.

»Esta no es una buena persona.

—¿Por qué? ¿Te ha molestado antes? —el hongo se quedó en blanco, ya que su sentido de la justicia explotó instantáneamente. Todo su cuerpo de hongo se volvió rojo vivo—. No tengas miedo. Una vez que ella despierte, te vengaré.

—No puedes vencerla. —Como un hongo que aún no ha aprendido un arte divino y no ha cultivado una forma humana, ¿de dónde obtuviste tu confianza?

—¡Tonterías! —el hongo estuvo momentáneamente ansioso, y brincó fuertemente—. Soy el único hongo en este bosque que se ha convertido en una deidad. No existe hongo que sea capaz de vencerme. ¿Cómo podría derrotarme ese hongo feo recién llegado?

Ella ya le había dicho que esa mujer no era un hongo. Zhu Yao se quedó un poco sin palabras.

Sin embargo, el hongo ya estaba sentado al lado de esa mujer, y había decidido no irse.

Oye, solo por darle algunos elogios, él realmente creía que era todopoderoso. Zhu Yao reflexionó por un momento, y de repente pensó en un plan.

—Gran deidad hongo obviamente eres invencible, y no le temes a las deidades pequeñas. Es solo que... —Zhu Yao usó deliberadamente un tono preocupado.

Como era de esperar, el hongo curiosamente volvió la cabeza.

»Es solo que escuché que esta practicante divina siempre ha sido muy astuta y que también tiene un muy mal hábito.

—¿Qué hábito?

—A ella le gusta especialmente comer hongos. Y, cuanto más guapos y blancos sean los hongos, más ella los ama. Además de que, ella es del tipo que se los come crudos.