Capítulo 128: Si Fuera a Llamarte "BUG", ¿Responderías?

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Sus palabras eran muy arrogantes. En primer lugar, ella condenó a Zhu Yao por retirarse de un duelo, ahora, ¿ella también quería que llevara el título de perdedora?

Las expresiones de la gente de la Secta de la Antigua Colina, se volvieron feas.

Haah, este terrible temperamento suyo.

Inicialmente, ella no quería abofetearla tan rápido. Pero, dado que la otra parte estaba tan ansiosa por poner su cara adelante, entonces Zhu Yao no tenía más opción que darle una buena.

—Soberana... Ru Lu, ¿verdad? —Zhu Yao se rio—. ¿De verdad quieres pelear tanto conmigo?

—Hmph —resopló Mu Meiyan fríamente—. Corta el rollo, ¿vas a tomar el desafío? ¿O tienes miedo de perder?

—No me importa si es una victoria o una derrota. Pero, con solo una batalla entre nosotras, se dañarán incontables vidas y se acumulará un sinnúmero de karma. ¿No crees que es un poco exagerado?

—En este mundo, el fuerte come al débil en primer lugar. Si esos mortales desean maldecir, entonces que se maldigan a sí mismos por no ser lo suficientemente fuertes.

—Pero, las hormigas luchan por vivir a pesar de su tamaño. ¿Quién aquí no ha comenzado como un mortal?

—Las hormigas siempre serán hormigas. Incluso si son capaces de salvar sus propias vidas de alguna forma, seguirán siendo frágiles hasta el punto en que morirán con un solo pellizco.

Sus ojos se volvieron fríos, como si ella pareciera haber recordado algo. Cuanto más hablaba, más agitada se ponía. Ese sentimiento de impotencia y de no ser capaz de defenderse, ella lo entendía muy bien. Es por eso, que se convirtió en la razón por la que ella perseguía la fuerza después de su reencarnación.

Las expresiones de todos los presentes, sin embargo, comenzaron a ponerse feas. Aunque todos sabían que lo que ella acababa de decir era verdad y que este era el estado actual del mundo de la cultivación, incluso si lo aceptaban en sus corazones, era diferente a decirlo abiertamente. Después de todo, ellos se habían establecido como las sectas justas de las deidades y tenían altos y poderosos títulos para enmascararse. Cuestiones como matar casualmente a un puñado de mortales, aunque algunos de ellos habían hecho tales actos, les sería imposible pronunciarlos tan triunfantemente. Después de todo, no eran practicantes herejes.

Zhu Yao vio que las cosas se habían calentado de la forma correcta.

—Escuché que la Soberana Ru Lu había entrado recientemente en la etapa Semidios.

—¿Y eso qué? —respondió Mu Meiyan fríamente. ¿Podría ser que ella estaba pensando que no tenía la capacidad de desafiarla?

—Nada mucho —continuó Zhu Yao con una sonrisa—: Es solo que recordé algo de repente. Nos hemos encontrado una vez antes, hace cien años, cuando acompañaste al Maestro de la Secta del Vuelo Azul a mi secta para pedir la mano de mi discípula en matrimonio. En ese entonces, todavía poseías un corazón amable, e incluso habías hablado en nombre del Maestro de la Secta Wu. Me pregunto si Soberana aún recuerdas ese incidente.

Las noticias del incidente donde el Maestro de la Secta del Vuelo Azul fue rechazado se había difundido en todos estos años. Como se esperaba, un atisbo de incomodidad pasó por la cara de Wu Song. Todos, en cambio, no esperaban que esta persona estuviera presente en ese entonces también. Todo el mundo estaba muy claro en cuanto que Ru Lu era una traidora de la Secta Celestial Indo y que había huido a la Secta del Vuelo Azul. Sin embargo, debido a que ella era ahora una Soberana Semidios, nadie se atrevía a mencionar esto.

Mi Discípulo murió una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora