Mi Discípulo murió una vez más

Capítulo 166: El Bromista Enviado por los Cielos

Zhu Yao nunca había visto una tribulación del rayo tan vasta como esta. No solo todo el cielo se había oscurecido, incluso los relámpagos que se filtraban inadvertidamente desde el interior de las nubes de la tribulación, tenían un poder que era comparable a la Tribulación de los Rayos de la Ascensión.

Las nubes de la tribulación se prepararon por casi siete minutos, antes de liberar el primer rayo de la tribulación. Cuando apareció ese rayo, una gran luz blanca envolvió instantáneamente una gran parte del cielo. Ese rayo... No, ya no podría ser considerado simplemente como un "rayo", ya que era un gran rayo. Cayó directamente hacia abajo, iluminando al mundo que originalmente estaba en la oscuridad. Como si de repente se hubiera convertido de día, la luz era tan penetrante para los ojos, que apenas uno los podía abrir. Sin mencionar que el poder del Dao Celestial contenido en el rayo de la tribulación estaba causando que los cuerpos de todos temblaran.

Las muchas deidades ya se habían sentado en el suelo para meditar, cuando comenzaron a comprender el Dao Celestial contenido en su interior.

Los rayos caían uno tras otro. Aunque Zhu Yao siempre se había especializado en las artes divinas de tipo rayo, esta era la primera vez que veía un rayo celestial de tal magnitud. Si los rayos de la tribulación no solo golpeaban a la persona que estaba encarando a la tribulación, bajo tal increíble poder, ella se preguntaba cómo terminaría el Reino Divino después de ser golpeados por ellos.

Zhu Yao se regocijó en secreto, ya que era genial que estuviera lejos de la escena, permitiéndole ver con seguridad este misterioso y gran espectáculo natural. Sin embargo, estos rayos eran un tanto gruesos, como si se estuvieran volviendo más gruesos con cada caída. Antes, todavía eran del tamaño de una cubeta, pero ahora, se estaba volviendo más como una torre alta. Eh... ¿Por qué sentía que el rayo se estaba acercando?

¡Jojo! Esta debe de ser sin duda su imaginación...

¡Mi trasero!

¡Ese rayo de la tribulación, se estaba acercando cada vez más!

—¿Qué pasa con la fuerza de este rayo? ¿Por qué se está acercando aquí?

Todas las deidades se dieron cuenta de esta irregularidad también.

—No es bueno, los rayos de la tribulación están a punto de caer aquí.

—¿Qué hacemos?

Antes, ellos todavía estaban a cien millas de distancia, pero ahora, ya podían oler el olor a carbonizado. Los relámpagos se estaban acercando también, ya que los rayos más recientes de la tribulación habían caído directamente al pie de la montaña donde se encontraba el Clan del Viento Fluorescente, convirtiendo todo el bosque en cenizas. Dentro de todo el campo de visión de uno estaba el relámpago blanco que penetraba los ojos.

—¡Corran! —gritó Zhu Yao, y solo entonces reaccionaron todos.

Uno tras otro, aquellos que volaban con sus espadas, volaron con sus espadas, en tanto que aquellos que volaban con sus herramientas, volaron con sus herramientas, mientras se dispersaban en la dirección opuesta a la tribulación del rayo. Ellos temían que el siguiente rayo de la tribulación cayera sobre sus cabezas. Después de todo, esto no era una broma. La fuerza de un rayo de este nivel, incluso si se tratara de una Deidad Tinta en etapa avanzada, quizás no sea capaz de bloquear el siguiente rayo. Uno solo estaría esperando la muerte si no corriera.

Al parecer, en un abrir y cerrar de ojos, todo el Clan del Viento Fluorescente se vació por completo.

Excepto por Zhu Yao.

Huevo de mamá. Ella solo acababa de despertarse, por lo que ni siquiera tenía una espada voladora. Ella en pocas palabras era incapaz de volar.

Madre barata, ¿qué pasó con la promesa de ser la preciada perla y preciosa bebé del clan? ¡Vuelve aquí!