Capítulo 18: Las Tres Vistas Colapsadas

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Los seis pares de ojos en la Sala Principal se movieron al mismo tiempo hacia ella. Especialmente Pequeño Wang, estaba revelando una expresión de total incredulidad, y con un movimiento de su manita, se zafó de su mano. La palabra "mentirosa" evidentemente estaba escrita en su par de ojos llenos de lágrimas.

Oye oye oye, este pequeño mocoso seguro no es agradecido. Ella ya le había dicho que pertenecía a la Montaña del Bosque de Jade, él fue el que no se dio cuenta del significado detrás de eso. No puedes culpar al cliente si no está familiarizado con el negocio, ya sabes.

—¡Saludos a la tía marcial sénior!

—¡Saludos a la tía gran marcial!

Aunque Zi Yuan y Zhao Yuanxiu estaban un poco renuentes, según la jerarquía, la de ella era aún más alta que la de ellos. Para mantener sus caras, todavía era necesario que la saludaran.

Con una sonrisa incómoda, Zhu Yao agitó su mano, y les hizo levantar la cabeza. Por reflejo, trató de agarrar la mano de Wang Xuzhi, pero este se alejó ágilmente. Su pequeña cara hizo un puchero enojado, y la miró con los ojos abiertos que implicaban "me engañaste".

Este pequeño mocoso, ¿por qué está lanzando otra rabieta?

—Yuanchen, Xuzhi, ustedes dos, váyanse por ahora. Zi Mo resolvió el problema e hizo que Yuanchen se fuera con el Pequeño Wang, que todavía la miraba en silencio. Tomando unos pasos más cerca de ella, a pesar de que Zi Mo tenía una sonrisa afable en su rostro, miró a las otras dos personas, y le dio una mirada significativa—. Pequeña tía marcial, por coincidencia estaba en el lugar de los hechos, por lo tanto, su opinión sobre este asunto será muy valorado. Me pregunto cómo cree que deberíamos tratar con este asunto.

Zhu Yao tembló. ¡Cómo demonios sabía cómo deberían lidiar con el asunto! ¿Estaba bien pasarle una pelota como esta?

—Jo jo... ¡Mi maestro me está llamando para almorzar!

Justo cuando estaba planeando huir, la puerta detrás de ella se cerró con un crujido. Zhu Yao miró despiadadamente al viejo Zi Mo. Eres un viejo zorro astuto, esto es evidentemente un asunto que ofendería a la otra parte, y así que decidiste pasarme la pelota.

Zi Mo le dio una sonrisa aún más amigable, y parecía como si estuviera ansioso por escuchar las enseñanzas de su tía marcial.

Zhu Yao dejó escapar un largo suspiro. Ella no tenía más remedio que morder la bala ahora. En cuclillas miró al niño cuyo cuerpo aún sangraba profusamente, y no pudo evitar fruncir el ceño.

—Ustedes, libérenlo por ahora. —Él todavía era un niño, después de todo.

Aunque Zhao Yuanxiu estaba un poco insatisfecho, todavía agitó su mano, y disipó el Arte de Restricción en el cuerpo de Xiao Yi.

Xiao Yi respiró lentamente, sin embargo, todavía estaba sentado en el piso, y estaba en alerta máxima hacia ellos.

Zhu Yao ya tenía más o menos una idea sobre el conflicto entre Xiao Yi y el pequeño gordito cuando estaba recibiendo su tablilla de identidad. Esto comenzó como una pelea entre dos niños, pero ahora se convirtió en un incidente que casi causó la pérdida de una vida. ¿Fue la cultivación la causante de todo esto? Había un dicho que decía así: "Con un gran poder, viene una gran responsabilidad". Sin embargo, en un mundo como este, cuanto más poder uno posee, mayor es su temperamento, cada persona actuaría en contra de otra cada vez que él o ella le conviniera.

—Xiao Yi, ¿por qué quieres matar al pequeño Zhao? —Así es, es matar. En aquel entonces, si el Maestro de la Secta no aparecía, pequeño gordito podría haber muerto.

Mi Discípulo murió una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora