En un instante, Zhu Yao sintió que esta era una mala situación, se dio la vuelta y trató de huir. Pero, con un simple movimiento de su dedo, Yu Jin la congeló. En un instante, él se paró justo delante de ella.
—¿Qué estás tratando de hacer, gran... —Zhu Yao quería gritar, pero, con un suave movimiento de sus mangas, ella ya no podía hablar tampoco.
Yu Jin le dio una sonrisa astuta. Diablos, este bastardo lo estaba haciendo a propósito. Su maestro no accedió a aceptar la posición de Maestro de Piso, por lo que cambió su objetivo a ella. Esta bestia salvaje.
—No tengas miedo. Solo voy a insertar una marca divina. No dolerá nada. —Un rayo apareció en su mano, y luego, un hilo de luz roja parpadeante se enredó entre sus dedos.
Es aún más extraño que tal fuerza y fuerte presión no te hagan daño, ¿¡verdad!?
¿Solo han pasado unos meses desde que ella entró al Palacio Divino del Rayo, y él ya le está entregando el cargo de Maestro de Piso solo cómo así? ¿Tenía que actuar de esta forma? Si ella hubiera sabido de esto, ella no habría traído a Miao Lin aquí.
Yu Jin levantó la mano cubierta de rayos, estiró dos dedos y tocó el centro de la frente de Zhu Yao, insertando directamente la marca divina en el cuerpo de ella. Antes de que él pudiera retirar los dedos, de repente surgió una complicación, ya que la marca divina se reflejó instantáneamente.
—¿Eh? ¿Tienes otra marca de sentido divino en tu cuerpo? —Yu Jin se quedó en blanco, y su cara estaba lleno de decepción. En un instante, como si hubiera recordado algo, observó a Zhu Yao por un momento. Entonces, él dijo impotente—: Así que realmente eres la discípula personal sucesora de Yu Yan, ¿eh?
Zhu Yao puso los ojos en blanco. ¿Quién más podría ser?
—¡Haah, olvídalo!
Yu Jin dejó escapar un largo suspiro, y removió el hechizo para fijar a Zhu Yao. La marca divina del Maestro del Piso era una marca relacionada con el sentido divino, y todos solo podían poseer un tipo único de marca del sentido divino en sus cuerpos. Inicialmente, él había pensado que su pequeña pequeña gran discípula no era más que un espíritu roca. Incluso si ella fuera la discípula de Yu Yan, simplemente sería una discípula normal, y no tendría la marca del discípulo personal sucesor. Quien habría pensado que... él había calculado mal. Cuando este hilo del sentido divino era plantado, solo el dueño del sentido divino podría eliminarlo. En otras palabras, a menos que Yu Yan se acercara para quitarlo, él ni siquiera debería pensar en poner la marca del Maestro de Piso en Zhu Yao. Una vez más, él observó a Zhu Yao.
—Ya digo, pequeña pequeña gran discípula, ¿por qué tu maestro tomó un espíritu roca como su discípula personal sucesora? —Y antes de esto, ella no debería haber ganado su forma humana todavía, ¿verdad?
—¡Eso no es asunto tuyo! —Zhu Yao puso los ojos en blanco—. Mi maestro tiene grandes ojos para la gente, es por eso que, entre el mar de personas, de los millones de discípulos, él eligió...
—Una roca —continuó Yu Jin en su lugar.
—... —¿Puedes no hablar de eso?
—Suficiente. Vayamos a ver al emisario del Palacio de la Nube de Adviento.
Yu Jin, quien falló en su asesinato, caminó hacia el frente del pasillo con una mirada decepcionada. Zhu Yao no tuvo más opción que seguirlo. Hmph, una vez que regrese, informaré de esto a mi maestro.
Miao Lin, sin embargo, esperaba pacientemente en la gran sala. Cuando él sintió que la gente se acercaba, se dio la vuelta. Con una mirada feliz, comenzó a caminar hacia la dirección de las dos personas.
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Mi Discípulo murió una vez más
RandomEl Venerado Maestro, Yu Yan, conocido como el número uno en el mundo de la cultivación, esperó durante dieciséis mil años, para por fin tomar un discípulo. Él le enseñó cuidadosamente y la cuidó diligentemente. Él la observó crecer como poco a poco...