Capítulo 142: Tatara-Maestro

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—¡Eso no es lo que quería decir! —¿¡Quién querría que literalmente juegues con flores y hierba tierna!?

Entonces, ¿qué querías decir? Yu Yan le dio una cara de que no entendía.

Zhu Yao se sintió un poco cansada en su corazón.

—Bien, no hablemos de este tema. En aquel entonces, te hice una pregunta y tú me dijiste que me dirías después de que haya ascendido. Ahora puedes decirme la respuesta, ¿verdad? ¿Te gusto o no?

—¿La pregunta en aquel entonces? —Yu Yan se quedó en blanco—. Estás hablando de... ser mi pareja practicante, ¿verdad?

—Sí. Entonces, ¿cuál es tu respuesta? —Zhu Yao lo miró fijamente a los ojos, con una expresión que parecía que ella se lo comería si él la rechazaba.

La expresión de Yu Yan, que todavía estaba helada por el hábito anterior, se volvió ligeramente roja. Después de un rato, él respondió:

—En cuanto a esto... Podemos hablarlo después de que se haya puesto algo de ropa.

—...

.

.

.

Inicialmente era un interrogatorio con una intensa atmósfera, pero terminó debido a su cuerpo desnudo. Zhu Yao sintió que incluso la moral de su próxima vida se había gastado por completo. Sin embargo, la persona involucrada ni siquiera tuvo la más mínima reacción. Después de sacar una gran cantidad de ropa, él incluso le preguntó con una mirada tranquila:

—¿Quieres rosa? ¿Blanco? ¿O rosa y blanco? —no solo venían con juegos completos de ropa interior y exterior, sino que también había delantales.

Zhu Yao realmente quería golpear sus puños en el suelo y gritar con dolor. ¿Qué pasó con la promesa de que todos los hombres eran animales que solo piensan en la parte inferior de su cuerpo? ¿Por qué uno de ellos se quedó fuera?

Debido a este alboroto, Zhu Yao perdió toda su intensidad.

»No tienes permitido volver a tu estado anterior.

Yu Yan retiró la manta, sacó a la estúpida discípula que estaba enterrada y que estaba actuando como muerta. Tocó el núcleo del jade con la punta de su dedo e insertó una energía pura de rayo, forzando cambiar el jade de nuevo a su forma humana.

»Solo has ganado tu forma humana no hace mucho y no hay ningún beneficio para tu cultivación si regresas regularmente a tu estado anterior.

Zhu Yao continuó actuando como un cadáver. Su corazón había sufrido un gran golpe, y ella no deseaba para nada levantarse.

»Sé obediente. —Yu Yan le acarició la cabeza mientras miraba a su discípula quien emitía un aura desanimada. Sus cejas se fruncieron, mientras que la levantaba de la manta al instante—. Tu maestro te enseñará la técnica de cultivación.

—Oh —respondió Zhu Yao, pero ella seguía sin poder reunir el más mínimo entusiasmo.

Era raro ver a su discípula tan poco entusiasta como esto. Yu Yan estaba un poco perdido. Él sintió débilmente que ella se había desilusionado por los asuntos de ayer. La verdad, no era porque él no quería responderle, pero...

Después de dudar por un momento, él apretó los puños. Luego, aprovechando la oportunidad, la abrazó y habló lentamente:

—Yu... Yao.

—¿Mn? —Zhu Yao miró con curiosidad a la cierta persona iluminada que de repente tomó la iniciativa.

La expresión de Yu Yan se hundió. Mirando el par de labios color rosa que se acercaban, él inconscientemente los presionó hacia él. Los dos labios se conectaron y, a diferencia del desconcertante y adormecido sentimiento que sintió antes, él se sentía extrañamente hambriento por más. Él no podía evitar querer probarlos aún más.

Mi Discípulo murió una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora