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—¡Amor! —Exequiel grita desde la cama— ¡Amor, vení!

—¿Qué pasa? —Zoe abre la puerta del baño de la habitación, apaga el secador de pelo y lo mira.

Él hace zoom en la pantalla de su celular y lo da vuelta para mostrárselo.

—No, no me arruines el viaje denuevo yendote.

Exequiel larga una carcajada y se sienta en la cama.— No reina, te estoy mostrando que juego el día de mi cumpleaños. —Le sonríe y espera unos segundos su respuesta.

—Chau baile a las doce de la noche cuando sea tu cumpleaños entonces. —Zoe se da vuelta para agarrar un peine y mirarse al espejo.

—No, juego a la noche.

—¿Eh?

—Muña, mírame —Le dice y ella lo hace, para ver cómo le mostraba la pantalla del celular denuevo—. Jugamos denuevo en el estadio de Boca, ¡El día de mi cumpleaños!

—¿¡Qué!? —Grita ella, tirando el peine a quien sabe dónde y corriendo a la cama— Ay bosterito, perdón —Lo abraza y le da besos—. No había entendido.

—¿Vos entendés esto? —Vuelve a mostrarle el celular riéndose— Una locura.

—No lo puedo creer.

—Yo menos —Exequiel, sin sacarse la sonrisa de la cara, sigue mirando la pantalla hasta que suspira y la mira a ella—. Tratemos de no pelearnos para mi cumpleaños.

—¡Exequiel!

—Y viste, cada dos por tres, te pinta a vos y chau estabilidad de pareja.

—Arruinaste un momento hermoso. —Zoe le pega en el brazo para levantarse de la cama e ir al baño.

—Era chiste, amor. —Él le pega una palmada en el culo para recibir un fuck you de su parte.

—Vos estuviste usando mi shampoo, ¿No? —Zoe sale del baño y a Exequiel se le escapa una sonrisa— Ni quiero saber para qué.

—Hasta Teo me sintió el olor a manzana en el pelo, Muña —Se agarra un mechón de pelo y después se huele la mano—. Aparte está super brilloso mi pelo ahora, es buenísimo ese shampoo.

—Después no te quejes si te uso algo —Ella lo señala y se sienta en la cama con la crema corporal en la mano—. ¿Cristian qué te dijo sobre la noticia?

—No sé, ahora me voy a bañar y lo llamo —Exequiel se acerca a ella para darle un beso y se levanta de la cama—. O ahora —Dice para llevarse el celular a la oreja y caminar hasta el baño—. ¿Qué hace' negro?

Zoe se ríe ante la tonada y lo poco que pudo esperar en llamar al amigo y niega con la cabeza para seguir poniéndose crema en el cuerpo.

Cuando se levanta para ponerse crema en el rostro enfrente del espejo, su celular que estaba apoyado en la cama, suena.
Se acerca despacio para ver quién es y atiende, confundida, al ver el nombre en la pantalla.

—¿Qué pasa?

—¿Estás con Exequiel? —Se escucha a Tiago del otro lado.

—Eh si, dormimos juntos. —Ella se ríe, como siempre siendo sarcástica.

—Dale Chini, hablo enserio.

—Recién entró a bañarse —Le dice mientras se ponía crema en la cara—. No me llames a mi si querés hablar con  él porque me pongo celosa y lo sabes. —Ella vuelve a hacerse la graciosa pero no escucha ninguna risa del otro lado.

Mi PecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora