Bakugou Pasivo •One Shots•

DekuKatsu

¿Les he comentado que amo hacer que esta pareja se envuelva en una relación tóxica?

Ojalá lo disfruten mi gente hermosa, porque últimamente ando sin inspiración para escribirles lo que les gusta :(

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Había una sola cosa que Bakugou Katsuki amaba hacer.

Era su pan de cada día, la razón por la que podía dormir tranquila por las noches.

Poner celoso a su idiota Alfa.

Disfruta de ver como los ojos esmeralda se oscurecían en locura, como sus puños se apretaban con fuerza y esa sonrisa de niño bueno desaparecía de su rostro.

Era fascinante como su aura cambiaba rápidamente y sus feromonas de Alfa se esparcía por la habitación. En ese momento todo su ser gritaba peligro.

Y katsuki lo amaba.

Verlo así de posesivo y dominante lograba colocarla húmeda.

Hoy planeaba tener un día tranquilo, era viernes, por lo que al término de clases probablemente jugaría videojuegos un rato con los idiotas de su grupo y luego pasaría el resto del día con su Alfa.

Pero todas sus buenas vibras se fueron antes de cruzar el umbral de la puerta del salón.

Al ver a la gorda de Uraraka sonriéndole a SU Alfa. Esa perra desgraciada no entendía que Midoriya era SU hombre.

Pero Katsuki no iba a dejar que las cosas se quedaran así, ninguna Beta desabrida le iba a ver la cara de estúpida.

Tenía dos opciones, podía ir y besar a su novio con fuerza, restregándole en la cara a esa perra de quién era Midoriya.

O podía coquetearle descaradamente a su mejor amigo, provocando que los celos de Izuku se activaran y dejara a esa idiota hablando sola.

Y obviamente iba a tomar la segunda, después de todo, una dama como ella jamás se rebajaría al nivel de las perras.

Era en esos momentos dónde agradecía que Kirishima fuera tan comprensivo y siempre la apoyará en sus planes para poner celoso al peliverde.

Se desabrocho un botón más de la blusa y con una caminata lenta se adentró al aula, acercándose hasta el lugar de su teñido amigo, ganándose la atención de más de uno.

Katsuki sabía que era hermosa, que sus cabellos rubios, su piel blanca y sus ojos rubíes le daban una apariencia exótica. Además tenía un cuerpo hermoso, con grandes atrivutos y pronunciadas curvas. Y su fuerte actitud era un factor clave para conseguir la atención de los chicos.

Aunque eso normalmente le interesaba tres hectáreas de la verga que no tenía.

Pero siempre era útil ser sexy, especialmente en estos casos.

Una linda y coqueta sonrisa se colocó en sus labios y con un pequeño saltito se subió a la mesa de su cómplice.

Sus piernas se juntaron delicadamente, invitando a que las recorrieran con la mirada. Ladeo la cabeza, dejando su cuello expuesto y separó sus labios, dándole un aire totalmente provocador.

-¿Tan temprano y buscando problemas?- Interrogó Kirishima, tratando de aguantar la risa.

-Me conoces, sabes que detesto que miren lo que es mío- Dijo chistando la lengua.

-Oh Blasty, todo el squad lo sabe. Te recuerdo que tampoco apruebas que los demás se acerquen demasiado a nosotros- Se burló el pelirrojo.

Kirishima se acercó más a ella, dejando sus cuerpos a escasos centímetros y su mano se poso levemente en la desnuda piel de sus piernas.