Marauder's Supremacy

Age

- ¿Está todo bien?

Hermione se giró confundida hacia Lily quien sonrió divertida al ver la cara de confusión ee la castaña.

- Quiero decir, es que no has dejado de ver a Sirius en un buen rato - dijo mientras ambas estaban sentadas en el sofá y Sirius discutía con James de cuanta sal debía colocar en la olla.

- Es que...no, no es nada - dijo aunque no muy convencida.

- Sirius es...todo un personaje, pero las cosas que hace no es con mala intención - hablo con voz suave y solo para que ella escuchara -  De hecho, te sorprendería lo bien que habla de ti todo el tiempo.

La castaña solo musitó un Mmm por lo bajo y Lily tuvo que contener su risa, parecía que Hermione estaba tan confundida y aturdida que todos sus pensamientos se hilaban.

- El problema con todos es que no se toman el tiempo de conocerlo - continuó la pelirroja - aunque Canuto no es que deje entrar a las personas a su vida tan fácilmente, es algo que te puedo decir de mi propia experiencia. De hecho, me recuerda a esos perros enormes de mal caracter a quienes debes extenderle la mano y dejar que se acerquen ellos o rogar que no te muerdan.

- Supongo - suspiró sin decir mas. Lily puso su cabeza en el hombro de ella y la castaña sonrió - Harry hace lo mismo conmigo.

- Oh - Lily pareció sorprendida, realmente enternecida - Parece que él ha sacado mas cosas de mi personalidad que de la de James.

- Algo asi, aunque no le gusta pasar nada de tiempo leyendo - dijo con tono divertido - de hecho, solo le he visto leyendo dos libros con mucho interés.

Lily enarcó una ceja - No me digas, uno de esos libros es Quidditch a través de los tiempos - sentenció mientras Hermione asentía - es el favorito de James, creo que lo tiene siempre en su mesa de noche. Pero, ¿cual es el otro?

- Uno de pociones, pero ese libro realmente lo metió en problemas.

- No se si quiera saberlo, de cualquier forma, eso no sucederá, ¿no es así? - le sonrió con dulzura la pelirroja - Hermione, puedes hablar conmigo, si quieres. Como amigas.

La castaña le miró y su expresión se volvió triste, nostálgica.

- Es...complicado. Me recuerdas a Ginny.

- La novia de Harry - musitó Lily - Es raro, ¿sabes? Creo que los Potter heredan un gusto  por las pelirrojas. Euphemia, la madre de James también era pelirroja, yo me casé con James y probablemente Harry habría tenido el mismo final. Enamorado de una pelirroja - dijo con un suspiro al final - Arthur y Molly son dos personas amables, me gustaría agradecerles por...pero...sería una locura, ¿no crees?

Hermione no dijo ni una palabra, pensó que quizás no fuese una locura pero ciertamente Molly y Arthur se sorprenderían.

- ¿Crees que puedas ayudarme con algo? Es esto en mi sueter que... - Lily comenzó a rascarse y se levantó con Hermione siguiéndole hasta la que era su habitación. La pelirroja se cruzó de brazos no sin antes cerrar la puerta y lanzar un hechizo silenciador - Nadie nos escuchará, ahora, ¿puedes decirme por qué traes esa cara? Vivo con un buscaproblemas, nada pasa desapercibido para mi, señorita.

- Es que...es una tontería

- ¿Tiene que ver con el monigote que está enseñandole a cocinar a mi esposo? Cosa que no logrará. Creeme, he tratado de hacer que cocine una pasta decente y aún no lo logro - se encogió de hombros - Entonces, ¿es Sirius? ¿Ha hecho algo que te desagradó?

- No, de hecho...ha sido todo lo contrario. Se ha comportado muy amable, pero...- Hermione se sentó en el borde de la cama - hoy ha dicho algo, acerca de que soy muy inteligente para algunas cosas pero para otras no. Entonces le pregunté que cual era el problema y solo me ha dicho que debo descubrirlo - terminó mientras fruncía el ceño - ¿Que crees que haya querido decir?