Hermione y Lily adornaban mágicamente el pastel mientras que Sirius las miraba con reproche, aunque no parecía para nada molesto.
- Les dije que no quería una fiesta de cumpleaños - siseó cruzandose de brazos.
- Yo te dije que a mi no me interesa - sonrió Lily sin mirarle - Me gustaría que por una sola vez, te dejes querer por mi.
- ¡Ya me dejo querer! Siempre me haces mimos en el cabello, cosa que me encanta. Me convierto en Canuto solo porque siempre quisiste un perro, ¡oh Lily! James se pondrá celoso.
- A mi también me gusta hacerte mimos Canu, eres un perro muy obediente - sonrió el castaño mientras Remus se acercaba.
- Con pulgas, pero todos te queremos así, Canuto.
- ¿Tu que opinas Hermione? - preguntó James corriendo a tomarle de los hombros y mirándole con una expresión divertida - ¿Prefieres al perro o al humano?
- ¡Ah! ¿Es que hay alguna diferencia?
Todos exceptuando a Sirius soltaron a reír, aunque él solo se hacía el difícil. Adoraba ver cuan rápido ella había encajado en aquel grupo, sobretodo, siendo tan féliz como parecía.
- Esto lo pagarás caro - susurró al oído de la castaña causando su sonrojo - Me gusta la seda, por supuesto.
- Sirius - siseó ella sonrojada - pueden escucharte - miró hacia donde estaban James y Lily.
- ¡Bah! Esos dos están pensando la manera en botarnos rápido de aquí, para lo mismo que nosotros iremos al apartamento. Lo que me recuerda...cuando dije que quería algo íntimo en mi cumpleaños, no me refería a esto Hermione Jean Granger - se quejó el pelinegro.
- Pues entonces, debiste ser mas específico. No entiendo tu aversión a celebrar tu propio cumpleaños, pero amas celebrar los de los demás - la castaña frunció el ceño y el solo soltó un suspiro.
- Larga historia Mione. Pero no, no la contaré hoy - finalizó besando su mejilla - ¡Eh Lunatico! ¿A que hora llega tu Banshee?
- ¡Sirius! - Hermione le dio un manotazo en el hombro y él solo sonrió.
- Nena, guarda toda esa energía para la noche - dijo a su oído - ¿Desde cuando tu y Dorcas...?
- Desde que no te incumbe, Canuto.
- ¿Entonces son novios? - insistió con una sonrisita casi perversa - ¿Amigos con derecho?
- Sirius - siseó Remus - no te pases de la raya.
- Bien, bien. Entiendo. Es solo que... no quiero que Dorcas te rompa el corazón, Remus. Sabes como es ella, igual que yo.
- Pero tu te has enamorado y ahora estás felizmente casado, ¿no crees que Dorcas pueda hacer lo mismo? - preguntó calmado el ojimiel y Hermione sonrió.
- Espera, ¿en serio estás enamorado de Meadowes? - preguntó Sirius incrédulo - Vaya, eso...bueno, es una tipa cojonuda, aterradora pero...cojonuda al fin.
James iba a decir algo cuando tocaron a la puerta. Todos se quedaron en silencio hasta que se asomó por una mirilla que habían hechizado.
- ¡Eh! Potter, ¿jamás te peinas? - saludó la pelinegra mientras, para sorpresa de James, esta le abrazaba.
- Espera Meadowes yo también quiero uno - saltó Sirius corriendo hacia ella y abrazándola. Dorcas soltó una risita y le dio unas palmaditas en la espalda - Joder, ¿te cortaste el cabello?
- Mira que no eres tan idiota, gracias por notarlo Black - agradeció mientras se quitaba la capa - Por cierto, feliz cumpleaños.
- ¡Oh pero mira! - Sirius la volvió a abrazar - Aprovecharé antes de que Remus se ponga celoso.
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Marauder's Supremacy
FanfictionLas reglas deben romperse pero para comenzar, una joven deberá dejar todo atrás.