- Puedes pasar a verlo si quieres. - indicó el médico, señalando a la puerta de la habitación.
Seonghwa terminó por salir algunos minutos después, con una sonrisa tranquilizadora. Aseguró que todo saldría bien y en aquel momento no tenía otra opción que confiar en él.
Tomé valor y entré a la habitación.
El hombre se encontraba leyendo, recostado en la camilla.
Las ventanas abiertas brindaban una inmensa claridad que iluminaba la habitación, haciéndola parecer menos deprimente de lo que era.
- Hola. - carraspeé y hablé luego de unos segundos en silencio.
Volteó a verme durante un momento y no reconocí al hombre que tenía enfrente.
A pesar de no haber pasado tanto tiempo, se podía notar como él se veía como si hubiesen pasado diez años en un segundo. Las arrugas en su rostro se habían multiplicado, mientras que ahora su cabello estaba casi completamente aclarado por la edad.
Me senté al lado de la camilla. Papá regresó la vista a su libro, sin darme demasiada importancia.
Suspiré cansado.
- ¿Cómo te sientes? -
- Estoy bien, no tienes que preocuparte por mí. - ajustó sus lentes y terminó con su lectura.
- Pues aunque no quiera, lo hago. - hablé cortante.
Finalmente, el hombre dejó a un lado su libro y fijó la mirada en la nada misma.
- Esto va a ser complicado... Se supone que hoy puedes volver a casa. Te quedarás conmigo y con mi novio. Sé que la idea no va a gustarte, pero Seonghwa insistió para que mamá pueda irse tranquilamente. - me miraba atentamente. - No voy a pedirte que simules que todo está bien entre nosotros. Todo lo que voy a pedirte es que no trates mal a Seonghwa, no quiero ver que apliques la ley del hielo con él. - aquel escenario que había imaginado, sobre unas largas semanas silenciosas volvió a cruzar mi mente.
- A mí trátame como más te guste. ¿Quieres no dirigirme la palabra? Está bien, pero como trates mal a Seonghwa... -
Papá no respondió y tampoco decidió mirarme.
- Voy a ocuparme de los papeles para que podamos ir a casa. En cuanto termine, Seonghwa pasará por nosotros. - me levanté y me dirigí a la puerta, abriéndola lentamente y girando mi cabeza para echar una última mirada a la habitación.
El hombre me miraba extrañado, aparentemente sin esperar nada como lo que le dije. Me miraba como si me desconociera, una dolorosa mirada.
Salí de la habitación y bajé lo más rápido posible, escapando de la situación; sorprendido, e incluso un poco extrañado de mi comportamiento con él. Un largo proceso de papeleo para llevar a papá a casa me esperaba.
(...)
- Ya salí de la empresa, ¿cómo vas tú? - me alejé un poco de la recepción, luego de indicarle a la mujer que me espere un minuto. Del otro lado de la línea, detrás de la voz de mi novio, se oían murmullos y voces conocidas, claramente los chicos exaltados por finalizar el día de trabajo.
- Estoy terminando con los papeles, Hwa. - veía a los doctores ir de aquí a allá todo el tiempo, rápidamente, algunos preocupados, otros que sonreían y mejoraban el día del resto.
- Bien, entonces voy por ustedes... Oh, espera, voy a comprar algunas cosas para el almuerzo y luego voy. ¿Está bien? -
- Sí, no te preocupes. Avísame cuando salgas. -
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¿Por qué eres así?
FanfictionKim Hongjoong... ¿Por qué me ilusionas si no sientes nada por mí? Shipp principal: Seongjoong Grupo: Ateez Es posible que mencione otro shipp o que mencione otros artistas, actores, etc. ¡Hola! Soy la escritora, este es mi primer fanfic. ¡Espero les...