¿Por qué eres así?

Capítulo XXXVIII: ¿Debería alejarme?

Llegó el viernes; Yuta pasó a buscarme por casa luego de que volvamos por la empresa. La tarde había sido un tanto complicada, pues los chicos se habían empeñado en molestar cuando supieron que no estaría esa noche. Bah, a mí me daba lo mismo. En realidad, el problema sería que se empeñen en molestar a Hwa... Bueno, no molestarlo en sí, sino que se pongan algo... difíciles de manejar. Sabía que Jongho, Yeosang y Yunho no le darían trabajo a Seonghwa, pero San, Mingi y Wooyoung... nada que decir.

- ¿Cómo estás? - me dijo Yuta al verme salir. Con una sonrisa le dije que todo estaba bien y comenzamos a entablar una divertida conversación.

Así llegamos hasta el parque del que Yuta me había hablado. Fue divertido, y me dí cuenta de que nos llevábamos tan bien como lo recordaba.

Me contó como conoció a Taeyong. Yuta era el delegado del curso al que entraba Taeyong, por lo que él era quien lo ayudaba al principio con las asignaciones. Luego, decidieron mudarse juntos, así Taeyong podía dejar de vivir en la incómoda residencia de la universidad.

No pasó nada muy relevante. Solo puedo decir que, a partir de ese día, Yuta y yo comenzamos a salir más seguido. Nos hicimos bastante apegados en muy poco tiempo, recuperamos el tiempo perdido.

Por otro lado, algunos días después, el manager nos dijo que tendríamos que comenzar a interactuar con quienes estaban al tanto del debut u comenzar con las promociones. En una de nuestras primeras apariciones en televisión, nos llevaron a San, Woo, Yeosang, Hwa y a mí con una tarotista. Nos pidieron que cada uno de nosotros le haga una pregunta. Al llegar el turno de Hwa, comentó que había alguien en el grupo con el que creía que podría llevarse bien. Sin embargo, esa persona lo evitaba. ¿Y de quién estamos hablando? Claro, no había nadie más en el que concuerde con ese perfil que no fuera yo. Nos hizo elegí unas cuantas cartas y comenzó a decir que éramos como los padres del grupo. Los chicos decían que mi personalidad era peor que la de Hwa. Malditos bastardos, si alguno de ustedes fuera el líder de nuestro caótico grupo también tendrían un mal temperamento. También dijo que pensamos mucho en el otro. Ya lo sabíamos. Digamos que en ese tiempo, la relación con Hwa no era ni de amigos ni de novios. Ni siquiera puedo describirla.

Hicimos unos cuantos lives también. En uno que Yunho grabó, Seonghwa y yo estábamos arreglando algunos temas pendientes. No fue una discusión, pero sí un intercambio de ideas. Seonghwa creía que era muy cariñoso con los chicos en comparación a él. Y bueno, tenía algo de razón. Al final, el vivo se cortó a mitad de nuestra discusión. Luego, nos quedamos un rato en la habitación a hablar del tema. No fue nada grave y las cosas quedaron... ¿Normales? ¿Era normal nuestra situación?

Otra vez, había salido a comprar unas pastillas para Wooyoung, quien andaba con dolor de cabeza. Ya no teníamos en casa y Hwa me pidió que me ocupe en lo que él cocinaba. A algunas calles de casa, inmerso en mis pensamientos, choqué con alguien, lo que provocó que caiga. El chico, alto, con lentes y pelo oscuro se me hacía conocido. No podía ser él... ¿O sí?

- Lo siento, lo siento. - dijo extendiéndome su mano para ayudarme a levantar. No la tomé, me levanté solo y me disculpé. Cuando estaba a punto de seguir mi camino, sentí que alguien me llamaba. Era el mismo chico con el que había chocado. - ¿Nos conocemos? - me dijo mirándome con atención. Mierda, sí que nos conocíamos.

- ¡Hongjoong! ¡Tanto tiempo sin verte! - una sonrisa se dibujó en su rostro. La única persona a la cual creí no volver a ver, la única persona a la cual no quería ver.

- Creo que... Me debes estar confundiendo. - dije para escapar lo más rápido posible de la situación. Yo estaba volviendo a encariñarme con las personas, pero su aparición solo me recordó que no debía acercarme a nadie más si no quería salir lastimado. Esto también incluía alejarme de mis mayores afectos. Pero... ¿De verdad sería capaz de alejarme de Seonghwa? ¿Sería capaz de la persona que me hizo sentir seguro sobre mí?

Volví a casa lo más rápido posible luego de comprar las pastillas. Las dejé sobre la mesa y subí rápidamente, bajo la expectante mirada de los chicos. Les dije que me iría a dormir, y al notar mi extraño humor me preguntaron si había pasado algo. Solo les dije que me encontré con alguien a quien no quería ver y me fui a dormir sin comer, antes de que Seonghwa subiera. No podía seguir acercándome a él. Sino, a la hora de que todo termine sería aún más difícil. Y rayos, ya lo era.

Con los días, comencé a alejarme un poco de todos. Cada tanto los chicos me preguntaban si me pasaba algo. En cuanto a mi compañero de cuarto, él parecía haberse resignado luego de un par de intentos de acercarse a mí. Sin embargo, su mirada parecía haber oscurecido, y unas notorias ojeras se habían hecho presentes bajo sus ojos.

Para soportar un poco el alejamiento, solía salir un rato a caminar algunas veces por día, para despejarme un poco. También, Youngjo solía llamarme. En cuanto se dió cuenta de lo que estaba haciendo, me dijo que no le parecía bien. Sin embargo, nunca me abandonó a pesar de que lo que hacía estaba mal para él. Yuta tampoco parecía dispuesto a alejarse de mí, y día de por medio me llevaba a rastras a tomar un café juntos. Me ayudaba, Yuta era de esas personas que te van a escuchar siempre e intentarán entenderte, aunque lo que estés haciendo no tenga ningún tipo de sentido. Y lo que yo estaba haciendo no tenía sentido. Mi intención siempre fue no lastimar a Hwa, pero estaba haciendo todo lo contrario.

Un día, a menos de un mes del debut, Seonghwa les dijo a los chicos que teníamos que ir a comprar algunas cosas; pues esa semana las compras nos tocaban a nosotros y era la excusa perfecta.

Me llevó a ese parque, que en el tiempo que estuvimos juntos, se había convertido en "nuestro parque". Íbamos cada tanto para descansar un rato, hablar, olvidarnos de nuestras responsabilidades. Podíamos sentarnos horas y horas sobre el césped y siempre la pasábamos bien. Cuando recordé todo eso, me dí cuenta de cuánto quería a Seonghwa. Lo quería incluso más de lo que había podido imaginar. Sin embargo, ya lo había lastimado y todo estaba perdido.