Capítulo LXX: Demasiado trabajo

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- Estoy cansado de estar encerrado~, Sannie... ¿Por qué no intentas convencer a Seonghwa de que me deje salir? Estoy mejor, mira, incluso estoy de buen humor. -

- Pff, sí, buen humor... Si tú lo dices... -

- ¡Oye! - golpeé levemente su brazo.

- Primero, deberías saber que tu novio no va a dejarte salir por cómo estás. No puedo creer que no le hayas contado lo de tu presión. -

- No me gusta preocuparlo... Y si se puso así con un poco de temperatura, ¿sabes cómo podría ponerse al enterarse de eso? -

- Bien, tienes razón, pero debería saberlo. -

Tal vez San tenía razón, pero el hecho de preocupar aún más a Seonghwa claramente estaba fuera de los planes.

- En todo caso, ¿no puedes intentarlo? Él ni siquiera piensa escucharme... -

- Seonghwa Hyung es el que más sabe de estos temas, él sabe cuándo estarás bien como para volver a trabajar. Además aún nos quedan un par de días, disfrútalos. - San se recostó en la cama, decidido a no seguir hablando.

(...)

Seonghwa subió durante la tarde, parecía cansado. No quería molestarlo, lo mejor era dejarlo descansar en paz. Además, habíamos pasado juntos los últimos dos días, descansar de mí no le vendría mal.

- Saldré a caminar un rato. - dije cuando lo ví entrar. Se sentó a mi lado y preguntó:

- ¿Te sientes mejor? -

- ¡Claro! - sonreí mientras él colocaba su mano sobre mi frente.

- Uhm, no parece que la temperatura haya bajado mucho... ¿Tomaste algo? - estiró su brazo hasta la mesa que se encontraba al lado de la cama, para tomar el bendito termómetro, mi peor enemigo.

<<Un día te tiraré por la ventana, lo juro.>>

- Lo que Yunho compró ayer. - Seonghwa me puso el termómetro y se recostó a mi lado. Asintió y esperamos algunos minutos.

- Como pensé, la temperatura no baja. Creo que te tocará quedarte aquí, Joong. -

- Pero estoy cansado de quedarme aquí, quiero salir. Mira, voy a abrigarme bien y saldré, no va a pasarme nada. - me levanté y tomé un buzo.

Si por Seonghwa fuera, me colocaría en una cajita de cristal para asegurarse de mi bienestar. Sin embargo, aquello estaba muy alejado de lo que yo quería.

- No tiene que ver con que uses muchos buzos o no. Simplemente necesitas reposo, eso es todo. -

- Pero-

- Pero nada, ven aquí, no seas terco. Descansa al menos hasta que la temperatura baje, ¿si? -

Digamos que la discusión continuó, y terminó conmigo saliendo enfadado de la habitación y Seonghwa hundido en suspiros.

- ¿A dónde vas, Hyung? - preguntó Yunho, mientras Mingi me miraba expectante.

- Saldré un rato. – los chicos se quedaron mirándome confundidos, sin terminar de comprender la situación. Ellos también sabían que su amigo haría todo lo posible por hacerme reposar hasta que esté completamente bien.

Una vez fuera de casa, comencé a caminar, intentando pasar por alto el viento helado que atravesaba.

<<Mierda, el bastardo tenía razón. Sí que hace frío...>>

Mientras tanto, una lucha interna surgía en mi interior.

Una parte de mí no quería ser cuidada por los demás, me hacía sentir un niño pequeño que necesita que siempre estén detrás de él. Siempre pude hacer todo solo, ¿por qué ahora tenía que dejar que él esté cuidándome todo el día? Además, Seonghwa estaba exagerando, no era para tanto. Era una simple fiebre que pasaría con el tiempo, nada de que preocuparse.

¿Por qué eres así?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora