Matar O Morir

LXXXVI

Jimin me sonríe con picardía apenas nota la falda rosa que traigo puesta.

¿La razón de no quitármela? Créanlo o no, es Kim Yugyeom. A pesar de que ya pasan de las nueve, todavía tengo fe en que aparezca... Tiene que hacerlo...

-¡te ves súper sexy! ¿A quién tratas de impresionar, chico guapo? ¡Si fuera gay, ya te habría plantado un beso!

Río un poco, golpeando suavemente el hombro de Park, tomando de entre sus brazos a Hannie.

Aunque realmente no ha sonado tan mal la idea...

-¡son tan escandalosos, lo juro! Algún día me van a agarrar en mis cinco minutos y los mataré... Ah, por cierto, linda falda, mocoso. Te ves bien.

Un sonrojo se empieza a apoderar de mis mejillas. Una cosa es que Jimin me joda, y otra cosa muy diferente que YoonGi me diga que me veo bien. ¡Nunca lo hace, tengo derecho a sentirme avergonzado!

-yah, déjenme en paz... ¿No íbamos a cenar?

-es verdad. Pero antes... Tae, Jin te ha llamado siete veces en la última media hora. Ayer marcó unas diez, y antier igual. Ya es momento de que le hables, porque si no también lo mataré a él - gruñe YoonGi después de darle un vistazo a una libreta que no sé cuándo sacó.

-¿quién es Jin?

Ay, lo he dicho yo...

Qué despistado...

-nadie importante... - responde Kim, incómodo.

-no, ¡Kook tiene razón! ¿Quién es Jin, Tae? Yoon siempre lo menciona, y realmente tengo curiosidad. Andaa, ¡dínos quién es! ¿Un nuevo novio? ¿Un brujo? ¿Una chica? ¿Un asesino? ¡Taeee, dilooo!

Kim suspira, y me da un vistazo. Yo me encojo de hombros. Realmente no me importa...

Nah, en lo absoluto.

Ni un poquito.

Tampoco es como que le fuera a dar un tiro en la cabeza si me entero que es una nueva y estúpida pareja. No, no, no. Tampoco estoy loco. Nah...

Digo, así en un rarísimo caso que ese tal Jin y Kim aparecieran muertos en un lago, ¿quién sospecharía de mí? Nadie. ¡Nadie! Los matará un fantasma, no yo.

Un segundo... ¿Siguen hablando?...

-¡(…) y siempre te llama! ¡Ya habla!

-Jimin, cierra la boca. Va en serio...

-¡anda, anda, anda, anda, anda, anda, anda, anda, anda, anda, andaa!

-¡carajo, Taehyung, haz que se calle y ya dile! - gruñe Yoons, tapando sus orejas con una mueca de diversión y molestia.

-¡okay, Jimin, cállate!

Jimin sonríe con suficiencia, me guiña un ojo, y guarda silencio.

Ambos esperamos ansiosos su respuesta.

-su nombre es SeokJin. Kim SeokJin. Él... Es un viejo amigo...

YoonGi le da un golpe en la cabeza, y lo mira con dureza.

Kim suspira.

-bien, bien... Jin es mi psicólogo...

Park y yo abrimos tanto la boca que juro que nuestras mandíbulas tocan el suelo.

Un sollozo infantil saca a Kim de su vergüenza.

-¡quiten esas caras de idiotas, están asustando a Hannie! - gruñe, quitándome a Han y arrullándola, calmando a la bebé, quien se queda profundamente dormida.