Cinco días después...
El tiempo es relativo. Todo depende de cómo vivas tu vida.
Por desgracia, cuando la alegría hace acto de presencia en tu día, éste parece ir más rápido.
Taehyung es mi felicidad, y gracias a él mis días se vuelven cortos.
Demasiado cortos.
Sus sonrisas, sus besos, su voz, todo. Todo él provocan que el tiempo vuele, y no me da tiempo de disfrutar correctamente de cada momento.
Pero no es sólo Taehyung. Jimin, YoonGi, Hannie... Cada momento que paso con ellos es maravilloso, es divertido, es... Hermoso.... Y nunca me había sentido tan feliz.
Es 30 de diciembre. Tae luce un lindo gorrito de cumpleaños, pues Jimin lo obligó.
-¿Y? - me pregunta Park al estar solos -. ¿Qué le vas a regalar a Tae?
No le respondo.
No sé si le guste...
-mh... Tomaré eso como que es una sorpresa. Ahora, tengo hambre, ¿ya podemos darle a Tae el pastel?
Sonrío un poco y asiento.
Jimin va corriendo por el pastel, mientras yo busco a Tae.
No está en su recámara. No está jugando con Han. No está molestando a Yoons...
¿Dónde está?...
Subo a la azotea, bajo al sótano, incluso me atrevo a salir a la calle para buscarlo... Pero no está.
Derrotado, regreso a la casa, y golpeo mi frente contra una pared cercana.
Un sollozo llama mi atención, por lo que busco con la mirada de dónde ha salido, y mis ojos chocan con aquella puerta roja con un grabado en ella.
No, por favor... Ahí no...
Mi cuerpo tiembla a cada paso que me acerco a esa puerta maldita.
No quiero bajar... No quiero, no quiero...
Pero lo hago. De nuevo. Por él.
Y empieza... uno, dos escalones... quiero salir corriendo lejos de aquí. Tres, cuatro, cinco escalones. Cierro los ojos con fuerza al empezar a entrar en la oscuridad. Seis, siete escalones. Dejo de respirar por unos segundos. Sé que está ahí. Mi pesadilla está ahí... Diez, doce, catorce segundos. Me atrevo a abrir los ojos, pero un sollozo sale de mis labios al ver aquella sombra maldita, y vuelvo a cerrarlos con fuerza. Ocho, nueve, diez escalones. Trato de tomar aire, me estoy ahogando. Bajo el onceavo escalón... El último, el peor... Me deja frente a mi pesadilla, frente al pozo, frente a mi dolor... Uno, dos, tre-
-¿Jungkook?... ¿Qué haces aquí?
No respondo. No puedo. No respiro. Me ahogo...
-¿Kook?...
Me atrevo a abrir los ojos y verlo.
No es la mejor idea.
Taehyung está sentado en la orilla del pozo, cerca de caer...
-aléjate de la orilla - murmuro con la voz quebrada.
Taehyung se ve por un segundo confundido, pero al siguiente comprende. Se baja de un salto de la barda, y corre a abrazarme, me carga, y me lleva fuera del cuarto.
-lo siento - murmura cuando por fin puedo respirar bien, ya lejos de esa puerta -. No creí que bajarías...
-he bajado por ti tres veces o más - gruño con la voz temblorosa -. ¿En serio dudaste que lo haría de nuevo? Eres un imbécil...
ESTÁS LEYENDO
Matar O Morir
RandomJeon Jungkook es un asesino a sueldo, a quien le han pagado mucho dinero por matar a un niño rico llamado Taehyung, sin embargo, al estar a nada de completar su tarea, dentro de su corazón de piedra algo se ve afectado y no puede jalar el gatillo. S...