CIII

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Me ahogo. Juro por Satán que me ahogo.

Me ahogo con mi llanto.

Lo intenté, juro que lo intenté... Pero incluso en la cosa más mínima me volví un fracaso.

-¿Kook? ¿Estás llorando?...

-no, estoy sudando por los ojos.

-mh, gracioso.

No respondo. Estoy demasiado ocupado en intentar parar mi llanto.

-oye, no... Nochu, mi amor... Es la primera vez que sales de tu cuarto en meses, ¿por qué lloras?...

Taehyung se acerca por detrás, y, a pesar de que trato de cubrir el caos en la mesa, la leche desparramada y algunos vasos rotos exponen mi idiotez.

-lo lamento... Lo lamento tanto, perdóname, Tae...

-hey, no... Ven acá, bobo.

Kim envuelve mi cintura con sus brazos y me atrae a su pecho con mucha delicadeza, besando mi cabello y jugando con mis manos.

-todo está bien, mi amor. Fue un accidente. ¿No te hiciste daño?

Con mucho cuidado empieza a buscar heridas. Al no hallarlas, suelta un suave suspiro de alivio, y vuelve a la posición inicial, balanceando nuestros cuerpos lentamente de un lado a otro.

-Nochu... ¿Por qué sigues llorando?...

-lo arruiné... Algo tan simple, algo tan pequeño... Y lo arruiné, lo arruiné por completo...

Quiero evitar que mi voz tiemble, pero es tanta la frustración, el enojo, que no puedo evitarlo.

Kim se queda callado, aún meciéndonos.

-está bien.

-Taehyung...

-no, de verdad. Está bien, Kook. Estás cansado, tu cuerpo parece no querer cooperar con tu mente, sientes que el mundo se te viene encima, y también que todo lo harás mal... Pero sólo te predispones, cariño. Todo está bien.

Molesto, me separo de él bruscamente y me pongo frente a frente, hirviendo en cólera.

-¡¿Qué derecho tienes tú a decirme eso?! ¡No sabes nada, idiota! ¡Te juro por tu maldito dios que no sabes nada!

-no te pongas así, escucha...

-¿Escuchar? ¡¿Escuchar?! ¡¿Qué mierda tienes por decir?! ¡¿Con qué más me vas a presionar para olvidar todo y seguir como si nada?!

-eso no es lo que-

-"está bien", ¡todo para ti está bien! ¡¿Por qué mierda entonces me siento tan mal?! ¡Me juras que todo mejorará, pero a cada segundo de mi asquerosa existencia quiero matarme con más ganas que antes! ¡Dime a la cara que todo está bien! ¡Miénteme de nuevo, cuéntame ese chiste!

No está bien, no está nada bien. ¿Por qué de tu boca no puede salir otra estúpida frase? No estoy bien, me estoy rompiendo a pedazos, mi mundo entero dejó de girar.

Frente a mí hay una soga, y la estoy amarrando al cuello con todo gusto.

-lo siento...

Río.

Me río a carcajadas, ¡grito a cada risa que doy!

-¿Eso es todo lo que sabes decir? - murmuro entre una rara combinación de llanto y risa -. ¿Por qué todo lo que sale de tu boca es "está bien", y "perdón"? No arregla nada, Kim. Ni tus estúpidos intentos de motivación ni tus putas disculpas.

Matar O MorirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora