Después de trabajar me fui a casa de Dylan a cenar.
Jeannette no estaba había salido con una amiga así que mejor para mi.
Estábamos viendo la televisión mientras le contaba lo que había ocurrido con Kayla y con Eva.
Dylan se me quedó mirando fijamente mientras le estaba contando y se ponia a negar.
-Yo no entiendo para que vuelves con Kayla.-
-Por qué la quiero.-
-La quieres y mira lo que te hace, te deja, vuelve cuando quiera, se folla a un tío que conoces.. Eres su marioneta.-
-No te pases, qué no es así.-
-¿Qué no? ¿Cuánto has tardado en perdonarla, Dalton? Y sin embargo otra vez Eva ha sido la perjudicada pero ¿sabes que te digo? Que tienes lo que te mereces.-
Suspiré indignado antes las palabras de Dylan y me cruzaba de brazos.
-Yo no voy a volver más con ella.-
-Eso dices tu ahora, veremos a ver dentro de una semana.-
-Ya lo verás, Dylan, no pienso volver con ella.-
-Lo que deberías de hacer es quedarte un tiempo tu solo, olvidarte de Kayla y de Eva, puede que ambas no sean la indicada y haya otra esperándote.-
-Pues se ha a quedado esperando porqué paso de echarme novia otra vez.-
-Bueno, no vuelvas con Kayla y ya está.-
Se escuchó la puerta de abrirse y ambos nos giramos.
Era Jeannette, estaba entrando a casa y se acercaba al salón mirándonos a ambos, se quedó mirándome por segundos.
-Hola.-nos saludo a ambos, luego fue a Dylan dándole un beso en sus labios y señalo la mesa.- ¿Que habéis pedido? ¿Comida mexicana?-
-Si, a sobrado nachos con queso.-respondió Dylan mientras la miraba.-
Jeannette se sentaba al lado de Dylan y se ponía a comer mientras miraba la televisión.
Dylan parecía proseguir el tema.
-Ahora vive tu vida y olvídate de problemas.-
-Si, eso haré.-
Jeanette nos miraba a los dos sin entender y tomaba el plato mientras comía.
Ella se levantó sosteniendo el plato, mirándonos a ambos y miraba a Dylan.
-Te espero en la cama ¿vale, amor?-
-Claro.-dijo Dylan tocando su mano por segundos y luego me miraba a mi.-
Jeannete desaparecía yéndose a la habitación y mire a Dylan haciéndole una señal subiendo mi barbilla.
-¿Como vas con ella?-
-Muy bien, nosotros estamos bien.-
-Me alegro por los dos.-dije con sinceridad mientras me levantaba del sofá estirando mis brazos.- Me voy a ir pero gracias por escucharme.-
-Ni darlas cara anormal.-
Solté una pequeña risa por el insulto y Dylan se levantó del sofá también.
Me dio un leve abrazo en forma de apoyo.
Me ponia contento saber que tenía un gran amigo aunque aveces sea imbécil, pero siempre me ha escuchado y apoyado en todo.
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Me bajaba de la cinta de correr después de haber estado corriendo sobre una hora.
