Tracy
Salía del instituto junto a Rosie.
Su padre nos recogía está vez y fuimos a almorzar a un restaurante de comida gourmet.
Comíamos Rosie y yo en una mesa aparte mientras que su padre almorzaba en una mesa reunidos con sus compañeros de trabajo, creo que tenía una reunión de trabajo.
Rosie tomaba una sopa de marisco que había pedido mientras que yo me quedaba jugando con el solomillo a la pimienta, aún no le di ni un bocado, me encontraba un poco de bajón.
-Ni si quiera has tocado el caviar, Tracy, ¿A ti que te pasa?-
Suspiraba con frustración dejando el tenedor encima del plato y la miraba.
-Es por Dalton, le noto distante.-
-¿Distante?-
-Si.-
-Os habéis acostado ya ¿no?-
-Si, ya te lo conté.-
-Entonces no me extraña, los tíos pierden el interés cuando se acuestan contigo.-
-¿Y eso por qué?-
-Por qué los chicos nos ven como un objetivo, una vez conseguido, ya va a por otra.-
-¿Crees que está con otra?-
-No.. hasta que la encuentre.-
-Ay, no me digas eso, Rosie.-
-Solo te estoy diciendo la verdad, lo que deberías de hacer es pasar de él.-
-¿Que ignore a Dalton? ¿Y que gano yo con eso?-
-Su atención, cuando una mujer pasa de un hombre después del coito ellos piensan que algo han hecho mal en la cama y dañan su ego.-
-Pero no quiero pasar de él, quiero estar con él.-
-Ya, pero cuanto más encima estés de él, más se alejara de ti, los tíos son así, imbéciles.-
Me sentía aún más deprimida por lo que me estaba diciendo Rosie y desviaba mi mirada hacia otra parte del restaurante resoplando.
-Mira, vámonos de compras y luego nos vamos al Milano a tomarnos un café.-
Dalton
Cuando llegaba a la cafetería que me indico Kayla, ella ya estaba tomándose un café en mi espera, con el móvil distraída.
Andaba hasta llegar a la mesa que se sentó y me miró de repente sorprendida por mi aparición pero sonrió con naturalidad.
-Hola.-ambos nos saludamos con educación al vernos al instante y ella se levantó para recibirme.-
Nos saludamos dándonos dos besos en la mejilla y me sentaba frente a ella con una media sonrisa, me alegraba de verla.
-Espero no haber tardado mucho, es que nunca he venido por esta zona.-
-Ah no te preocupes, yo estoy viendo aquí hace poco.-
Le sonreía sin más esperando que el camarero viniera y le había pedido un café solo.
Ella había dejado el móvil boca abajo, me fijé en ese detalle al vuelo y luego la miraba quedándome deslumbrado a su presencia.
-Ha pasado mucho tiempo, eh.-dije.-
-Bueno, casi un año, parece más tiempo pero no es demasiado.-
-Si, en realidad parece que fue ayer..-