Dalton
Me encontraba tumbado en el suelo del ring mirando al techo.
Me sentía con cansancio acumulado de tantos entrenamientos, a veces pienso en parar pero luego me pongo a pensar ante las palabras de Malcolm y me entran ganas de..
En el gimnasio donde me encontraba era un gimnasio de El Bronx.
Otro gimnasio evidentemente pero este era más pequeño y venía pocos boxeadores, porque en Manhattan no había gimnasios.
Me levantaba del ring observando que Philip se acercó a las cuerdas y colocaba una mano agarrando la cuerda.
-Anímate, Dalton, he hablado con Oliver.-
Alzaba mis cejas por lo que dijo, y me quedaba callado por segundos pensando en que habían hablado, decidí preguntarle directamente no quería andarme con rodeos.
-¿De que has hablado con él?-
-Sobre el combate que vais a tener tu y Malcolm, será dentro de tres meses, en Italia.-
-¿En Italia? ¿Por qué Italia?-
-Por que en Italia es conocido Malcolm, me contó que estuvo un tiempo boxeando allí y se ganó su público.-
Si, era cierto... estuvo dos años desaparecido por ese motivo cuando yo inicie el mundo del boxeo.
-¿Y por qué tiene que ser allí?-
-Pues por qué como tú perdiste el combate con Ricardo, ellos tienen el poder de elegir en qué sitio boxear.-
Iba a hablar pero Philip me pauso.
-Y está vez te juegas el título, si pierdes, pasará a manos de Malcolm.-
-¿Como así? Ni si quiera llevo siendo campeón del mundo un año.-
-Ya.. sería penoso si lo pierdes tan rápido, y no te lo digo a malas.-
-Lo sé.-suspiraba pensando en lo que me venía encima y pase mi mano por mi nunca.- No tengo otra que entrenar más duro.-
-Muy duro, Dalton, he visto combates actuales de Malcolm y ha mejorado muchísimo.-
Soltaba una carcajada estúpida colocando una mano sobre mí y empecé a negar sin creerme nada de lo que me dijo.
-Eso ha sido muy bueno, Phil, que Malcolm ha mejorado.-
-Vale, pues no me creas, ya te llevarás la sorpresa.-
-Mira, Oliver no es mal entrenador pero tampoco es el entrenador de Mike Tyson ¿me entiendes? Y Malcolm obviamente no sirve para boxear.-
-Si quieres te paso unos vídeos y lo ves tú mismo, pero más vale que te pongas las pilas.-
-Phil, está todo bajo control.-
-No, Dalton, no está nada bajo control.-dijo enojado mientas agarraba las cuerdas del ring con fuerza y clavo su mirada a mi.- Yo no he venido desde Nueva Jersey hasta aquí para no hacer nada, he venido a ayudarte por qué te aprecio y te quiero, e incluso estoy dejando mi dolor hacia un lado para centrarme en ti, no me digas que está todo bajo control.-
Me quedé callado sin querer discutir con él aunque no tuviera razón.
-Desde que deje de ser tu entrenador, has bajado mucho el rendimiento y solo has conseguido un combate, solo uno.-
-Tu fuiste el que le recomendaste al entrenador de Khalil.-
-Yo lo hice pero pensaba que tenías más criterio, Dalton, ¿Aceptar un combate en México cuando aún no eres famoso del todo en Europa?-