Cuadragésima quinta parte.

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La reunión había llegado a su fin, luego de varias horas en las que cada presente, incluyéndola, habló y presentó partes del proyecto. Mas el enojo seguía latente en su interior y una vocecilla le susurraba una y otra vez lo que Kara le dijo. En varias ocasiones Ally chocó la mirada con su padre, quien la fulminaba, y eso era algo que ella no entendía, puesto qué, él no podía estar enojado por lo que dijo Kara, cuando él mismo le rogó que se acercara lo más posible al ahora presidente y dueño de la empresa.

El ultimo presente salió de la sala de reuniones, o eso ella creyó. Sin embargo, un brazo la haló hacia atrás fuertemente cuando ella se disponía a cerrar la sala- ¿A qué demonios se refirió esa mujer cuando dijo aquello delante de todo el mundo?- preguntó, airoso, con el rostro bañado en furia. Allyson quedó desconcertada cuando su padre le preguntó aquello.

- No entiendo el motivo de tu furia- contestó ella, decidiendo no manifestar el enojo que tenía encima.

- ¿Te acostaste con él, Allyson?- escupió, sacudiéndola ferozmente. Allyson gimió de sorpresa y dolor al sentir como las uñas de su padre se enterraban en sus brazos. Le sorprendía lo que su padre le estaba haciendo y el enojo encendido en sus ojos, casi de una forma lunática.

Trató de zafarse del agarre violento del hombre que era su padre, pero que en ese momento parecía un desconocido- Suéltame, me estás lastimando, papá- se quejó, adolorida, sintiendo como su piel empezaba a escocer porque estaba totalmente segura de que las uñas de su padre la habían traspasado.

- Te llamé muchísimas veces ayer- gruñó- Y como no contestabas te mandé mensajes diciéndote que hacer y simplemente dijiste que no- contestó, dejándola más desconcertada de lo que anteriormente estaba.

- No sé de qué demonios me hablas, joder- se quejó, logrando zafarse de las garras de su padre.

- ¿Te harás la estúpida ahora?- gruñó nuevamente- Maldita se...

- ¿Qué demonios pasa aquí?- la voz enojada de Damon interrumpió la del padre de la rubia y llenó el lugar de forma estruendosa. Los ojos del hombre se detuvieron en los brazos de Allyson, apreciando las medias lunas sangrantes que dañaban su piel sedosa y pálida. Tanto Ally, como su padre, permanecieron en silencio, sin saber que contestar ante la pregunta del pelinegro que cada vez se enfadaba más- Pregunté que qué demonios esta pasando aquí y, por qué los brazos de Allyson sangran- cuestionó con la voz teñida de coraje.

- Será mejor que no te involucres, maldito embaucador- contestó, furioso el padre de Allyson. Allyson abrió sus ojos con temor, advirtiéndole con los ojos a su padre. Debía cuidar sus palabras o cagaría las cosas con Damon.

- Cuide sus palabras, señor...- dijo, suavemente, apreciándose la furia pasiva en su timbre de voz.

- A la mierda- graznó, señalándolo- Te mandé a investigar, maldito- siguió señalándolo- Tu fortuna se ha hecho a base de engaños- reveló- Eres dueño de la mayoría de compañías en el país porque has sabido como engañarlos y buscar su punto débil, tal como hiciste aquí, conmigo- escupió, avanzando hacia Damon, quien permaneció tranquilo y taciturno, enseñándole que no le daba temor, en lo más mínimo, el comportamiento agresivo del padre de Allyson- ¡Perdí mi compañía porque me engañaste!- gritó.

- Usted perdió la empresa porque es un irresponsable que no supo administrarla- respondió- Cuando me hice cargo de ella encontré muchísimos problemas que en cuestión de días la habrían terminado de destruir si no los hubiese solucionado. Sin embargo- hizo una pausa- Tiene toda la razón al decir que soy dueño de la mayoría de las empresas del país, pero no porque los engañé, todos ellos las perdieron porque son y fueron igual que usted: Unos incompetentes- dijo lo último con furia- Así que le conviene cuidar sus palabras porque todas las oportunidades que tiene para recuperar la empresa penden de un hilo ante sus palabras injuriosas- chasqueó la lengua, con el cuerpo cómodamente apoyado en la pared y las manos metidas en los bolsillos- Le di todas esas oportunidades porque quería a su hija cerca y usted podía cumplirme eso sin que yo tuviera que hacer mucho esfuerzo- dijo lo último dejándose llevar por el coraje, pero luego se dio cuenta de ello, así que la miró, apreciando como el semblante de ella se volvió inescrutable. La rubia le dio una ultima mirada, haciendo una mueca cuando movió sus brazos y dejó la sala- Allyson- la llamó, extendiendo su brazo para alcanzarla, pero ella lo esquivó, pasando por su lado.

« La tentación de Damon» #2 COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora