Capítulo 49 - El viento y el roció de la media noche (9)

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—¿Eh?, tan obediente. — Li Mo dijo con una sonrisa de sorpresa: —Hace un momento no fue tan obediente conmigo, fue muy difícil.

Sólo entonces Li Yuan frotó con fuerza la cabeza de Li Mo, sonriendo: —Has tirado de esta manera a mi pequeño, ¿qué más quieres? ¿Quieres alguna compensación?

—No, no, no. — Li Mo tiró de la comisura de los labios, al ver que Li Yuan estaba de mal humor, así que se inventó una sonrisa y aprovechó la pendiente para bajarse [1]. —No te preocupes, Yuan Ge, me equivoqué, los que no saben no tienen culpa, perdóname una vez. ¿No dijiste antes que ibas a proteger a la belleza? Supongo que me lo planteé de otra manera.

— ¿No estarías renunciando a él por sexo...? — Li Mo pensó un segundo, tragó saliva y dijo con una sonrisa descarada: —¿Él es Xiao Qi? Estaba equivocado, Ge, me equivoque de verdad, mis ojos no conocían a la pareja [2] de mi primo....

—No derrames tus tripas [3] en mi territorio. — Li Yuan tiró del brazo de Li Mo y le dijo con impaciencia: —Sal, no hagas esperar al primo.

—Bien, bien, bien. — Li Mo respondió con una ráfaga.

En el camino, pinchó a Li Yuan con el codo: —Gege, ¿cuándo te hiciste practicante [3]?

Li Yuan se mostraba gentil y autocomplaciente, sin decir una palabra, no se podían ver defectos en su rostro.

Li Mo resopló: —¿Crees que se lo diré a los demás?

Li Yuan le miró de reojo: —¿Qué hay de malo en que practique tiro al arco en mí tiempo libre? La asamblea de la capital se acerca, así que te alegrarás de que dé no haga el ridículo está vez ¿no?

Los ojos de Li Mo sonrieron: —Entonces el talento de Yuan'er se considera excepcional, así que sólo tienes algo de tiempo libre... para practicar.

※※※※※※※

La elegante habitación del pabellón superior estaba llena de sangre, Li Sheng seguía sentado al final de la mesa, su comportamiento era tranquilo, sólo Xiao Fuzi quedaba vivo en el suelo, no hablaba, ni miraba a Li Sheng, estaba tranquilamente arrodillado, esperando el momento de la muerte que finalmente llegará.

Li Yuan y Li Mo se abrieron paso, y Xiao Fuzi levantó la cabeza con cansancio, sus ojos vacíos e impíos los miraron.

Li Mo levantó una ceja, él no tenía nada que ver con ese asunto, Li Yuan le miró con frialdad.

La voz ronca de Fuzi estaba teñida de un sollozo ahogado, y de principio a fin sólo dijo esta frase: —Dianxia, perdóneme la vida.

Los ojos sin vida los miraban sin comprender.

—Ahora ya sabes que, para pedir clemencia, es demasiado tarde. — Li Yuan estaba en medio de su ira y se rio con enojo: —Si hubiera sabido esto, por qué lo habría hecho en primer lugar.

Li Mo dijo despectivamente: —Hmph, un traidor es sólo un traidor, ¿cómo te atreves a pedir piedad también?

Diciendo esto, levantó su arco y tensó la cuerda, con un sonido agudo de la cuerda, una flecha atravesó el corazón de Xiao Fuzi, la sangre fluyó como el agua, Xiao Fuzi cayó lentamente al suelo, mirando en dirección a Li Yuan y Li Mo, la sangre se derramó por la comisura de su boca, y dijo con dificultad.

—Dianxia, perdóneme la vida...

Li Mo recogió su arco y miró a Li Yuan. —Esta flecha debe venir de Yuan Ge, no esperaba que las flechas de Yuan Ge... fueran también muy precisas.

Li Yuan le miró de reojo: —Tú eres un experto parado aquí mismo, ¿cómo puede un talento insignificante [5] atreverme a hacer el ridículo [6]?

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