Obedéceme

Capítulo 1 - El inigualable príncipe heredero (1)

Volumen 1: Un hombre que no es frívolo está desperdiciando su juventud [Indomable*]

Qi Wang Shizi [1] tenía un espíritu innato de sospechosa por naturaleza.

Sin embargo, si no hubiera sido por este xiao xiongdi [2] de aspecto frio que estaba frente a él quien retuvo una flecha y que ahora tenía un corte en la parte inferior de su abdomen mientras estaba apoyado contra la montaña fría y húmeda con la sangre drenando de su cuerpo, Li Yuan no lo habría mirado demasiado.

Definitivamente era una persona frígida, apenas cubría la herida ensangrentada en su abdomen, sin decir una palabra, se mantenía apoyado contra la escarpada pared de piedra justo en la hendidura de la montaña, una seda negra cubría su rostro, mostrando solamente un par de ojos indiferentes y vigilantes, bajó los párpados y jadeó suavemente mientras soportaba el severo dolor en su abdomen.

Li Yuan estaba ileso. Excepto por toda la sangre salpicada en su cuerpo, la túnica de seda verde nieve que componía a Hualuo estaba completamente ensangrentada, ahora estaba seca y dura, siendo indescriptiblemente incómoda el contacto con su cuerpo.

—Aquí, xiao xiongdi. — Li Yuan se inclinó al costado del niño, las comisuras de su boca estaban ligeramente inclinadas, le dio una palmada en el hombro, sacó el frasco de medicina hemostática que traía consigo y se la tiro entre sus piernas.

Lo tomó con frialdad todavía con los párpados colgando, su mano cicatrizada y delgada tomó la pequeña botella de porcelana, mordió el sello de cera y vertió la medicina líquida en su herida, ésta se esparció por la herida y el dolor hizo que se mordiera los labios. Inhalo.

— ¿Sabes quién soy? — Li Yuan todavía estaba de pie apoyado contra la pared de piedra a su lado, su expresión se relajó, como si no acabara de experimentar una lucha de vida o muerte.

El joven de negro guardó silencio un rato y negó con la cabeza.

—Entonces porqué bloqueaste la flecha. — Los ojos de Li Yuan se volvieron cada vez más interesantes, sus párpados estrechos se abrieron, mirándolo de arriba abajo y le preguntó: — ¿Qué tipo de recompensa quieres?

—Es sólo... —Pareció que decía algo, pero debido al dolor se escuchó como un susurro incoherente. Hizo una pausa por un momento, y a regañadientes dijo: —Es sólo que el camino era desigual [3].

Li Yuan arqueó las cejas, evasivo. Acababa de regresar de la montaña TianJue, un lugar desesperado fuera del mundo, y él al ser el digno Qi Wang Shizi, nunca había estado tan avergonzado. Antes de entrar en la frontera de Yuezhou, no tenía suficientes escoltas, pensó que nada saldría mal, pero aun así fue descuidado. Estaba rodeado de asesinos tan pronto como galopeo el caballo, todos los que vinieron eran jefes, y los guardias imperiales [4] que lo rodeaban murieron con tanta pulcritud.

En ese momento, Li Yuan estaba sólo con docenas de asesinos. Su caballo era rápido, pero solo pudo durar un tiempo. Después de un período de tiempo, el joven vestido de negro frente a él cayó del cielo, y Li Yuan ni siquiera se dio cuenta de donde vino.

Este joven fantasmal atrajo toda la atención de Li Yuan, aunque su rostro estaba cubierto y solo se podía ver un par de ojos, se notaba que era muy joven. Su cabello de media longitud estaba atado a la mitad superior, suavemente por encima de sus hombros. Más tarde, cuando el viento frío se levantó en la noche de otoño, dos largas vainas de espada con serpientes verdes dibujadas en relieve colgaban del cinturón de la espada de la cintura trasera.

Bajo la fría luna, su piel se veía enfermizamente pálida, como si hubiera estado enterrado en el suelo y no hubiera visto luz durante varios años, su expresión era melancólica e indiferente. Li Yuan lo vio mirándolo a los ojos con inquietud y preocupación.