—Noah Claden... Disfruta ir de cacería, es amante de la lectura, detesta los libros de romance, sólo le gustan los grandes pensadores, estrategas y economistas, le gusta pintar para desestresarse, bebe una copa de vino todas las noches para poder dormir, a pesar de vivir en el norte, no le gusta el frío por lo que tiene una gran colección de abrigos de piel, ah, él tiene el dinero suficiente para comprar todo lo que quiera entonces si le das un regalo, atesora aquellos que tienen un significado único o las cosas hechas a mano... Espero que esa información te sea de utilidad.
Noah pasaba por ahí y escuchó toda la conversación. —Princesa, todo lo que dijo la emperatriz Arendis es verdad, pero si desea saber algo de mí, puede preguntarme directamente.
Camelia sonrió con timidez y vio a Noah a los ojos. —Duque, tendré en cuenta sus palabras.
—Está bien. —Habló Noah—. No debiste molestar a la emperatriz por un asunto trivial si podía contestarlo yo.
—¡Para nada! —Agité mis manos—. No me molesta en absoluto, ya que están ambos aquí me iré, que pasen buena tarde.
Elise se retiró y Camelia dejó de lado su bordado.
—¿Quiere sentarse a mi lado?
—Tengo asuntos que atender, será en otro momento, disculpe.
—Oh, entiendo, entonces hasta luego.
Rápidamente Noah se alejó y la princesa continuó con su pasatiempo.
Noah me persiguió y al alcanzarme hizo una reverencia. —Su majestad, permítame acompañarla.
—No, acompaña a tu prometida, quieres sacrificarte por el imperio, hazlo, pero no sacrifiques a la princesa, ella no merece estar toda una vida en un matrimonio sin amor, si no puedes amarla, al menos no seas indiferente con ella, además, si la enamoras hablará bien de nosotros ante el emperador, tiene sus ojos en tí, asegúrate que así sea siempre.
—... Cómo ordene, hablaré con ella.
—Bien.
Me marché y fui a mi habitación, uno de los sirvientes llamó a Elian tal como lo pedí, así que entró con una maleta de equipo médico.
—¿Se siente mal? —Me preguntó.
—Sabes bien que ha pasado mucho tiempo desde que vi a Noah por última vez, me siento incómoda con su matrimonio, quiero algo que me relaje, luego hablaré con el rey, acordaremos una fecha para la boda y firmará la anexión con su sello.
—Su majestad, si tiene sentimientos por el duque Claden, sepa que usted es poderosa, puede tenerlo a él y a este reino.
—¡¿Cuándo he dicho que tengo sentimientos?! No interferiré, esto es lo mejor para todos.
—Puede que sea así, cuando la empecé a conocer usted tenía dos grandes opciones, ahora sólo le queda el duque Keneth Moneti, pero parece que ya no le interesa, no, ya no le interesa ninguno.
—Conozco mi lugar, ya no estoy tan joven para estar entre amores, ahora solo quiero restaurar mi imperio y liberar a mi pueblo.
En la tarde, me reuní con el rey para confirmar la boda, Noah fijó la fecha en dos meses, así que finalmente el reino Descileo estaba bajo mi poder.
Realmente no interferí en la boda, estuve enfocada en los asuntos del imperio, compré unas joyas y telas de la mayor calidad como regalo y asistí al evento cuando fue tiempo.
Era primavera, se realizó en una de las iglesias más grandes de Artinia, me encanta resaltar, pero esta vez llevaba un vestido corriente color verde y Keneth también asistió como mi acompañante, llevaba un traje negro que se le veía de maravilla.
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La cacería de la bruja [¡Terminada!]
FantasyMelanie fue absorbida por un portal hacia un mundo alterno basado en su libro favorito y toma el papel de la protagonista, una bruja de nacimiento en un mundo donde la magia es prohibida. ¿Plan inicial? Evitar el compromiso con el mc basura, recuper...