Capítulo 99

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Por dentro había una enorme esfera violeta flotando, centelleaba y tenía un aura fuerte, la sacerdotisa subió escaleras que la llevaban a una plataforma para estar a la par del oráculo.

—Ha pasado mucho tiempo desde que se ha utilizado. —Dijo Lían.

—Nunca esperé presenciar tal suceso—. Dijo Beatriz.

—Me pregunto qué palabras dirá la Diosa.

Camelia estaba hablando con su padre entonces Noah se acercó a mí y me preguntó en voz baja —¿Por qué siento que tienes otras intenciones además de escuchar un consejo?

—Quiero resolver un asunto. —Contesté—. Un problema que está ligado a la legitimidad de la sacerdotisa.

—Entiendo. ¿Está relacionado con tu cambio de apariencia hace unas horas?

—Entonces si me descubriste... ¿Cómo?

—El comportamiento, si aprendí a diferenciarte de otra persona con la misma apariencia, también puedo identificar a la misma persona con diferente apariencia.

—Así es, tienes un don único supongo.

—Quería informarte que seguí tus deseos y empecé a estar con la princesa todas las noches.

—¿Eh? ¿Por qué me hablas de tu intimidad? —Me sonrojé—. La duquesa había hablado conmigo antes sobre ese problema, me alegra que lo hayan podido resolver.

Aunque no fue realmente mi deseo.

—... Así es.

La sacerdotisa, desde lo más alto, extendió sus manos horizontalmente frente al oráculo y éste empezó a girar rápidamente, su color negro pasaba a ser un dorado lentamente y hasta haber cambiado de color totalmente, toda la sala se tornó blanca.

Estábamos en un espacio blanco, no se miraba nada, no había comienzo ni fin, sólo podíamos vernos a nosotros.

—Yo, como la sagrada sacerdotisa principal, Fiorella Bont Sertai, convoqué el oráculo luego de tanto tiempo para solicitar un consejo sobre la futura guerra.

Nadie contestó.

—¿Podría al menos confirmar su presencia? Sus súbditos están ante usted.

...

La sacerdotisa se volteó y me miró. —Lo lamento su majestad, hemos decepcionado a la Diosa, ella no nos ayudará.

—Quiero consejos sobre la guerra. —Dije en voz alta—. ¿Qué tienes para mí?

Entonces una voz celestial habló. —Prepara tu ejército y recibe a los enemigos desde el oeste, sin embargo, esta guerra no consiste en fuerza, utiliza tu intelecto más que mi magia y vencerás.

Todos guardamos silencio. En especial yo que quedé perpleja ¿No sé supone que sólo la sacerdotisa puede consultar al oráculo?

Fiorella tenía una expresión extraña, sabía que era su fin. Volvimos a la normalidad y bajó lentamente de la plataforma.

—Hemos admirado un momento histórico. —Dijo Fiorella—. Por favor todos guarden confidencialidad de lo que acaban de escuchar.

—Por favor todos retírense, me gustarían hablar con la sacerdotisa en privado.

Noah sabía lo que sucedía y no dijo nada, salió en silencio junto a los demás.

Una vez estábamos solas, la confronté.

—¿Por qué fingiste recibir su llamado? No mereces este puesto.

—Desde aquél suceso, la Diosa no ha vuelto a actuar en este mundo, ni siquiera para continuar su iglesia, yo era joven cuando vine al santuario, el sacerdote principal de ese entonces me llamó a su oficina y me ofreció el puesto, alguien debía hacerse a cargo, es un sacrificio, sé que cuando se restablezca el imperio moriré y mi alma simplemente se desintegrará, pero lo hago por el bien de la iglesia y las personas, la fé es muy importante en las batallas, si revelamos la verdad, el imperio nunca volvería a la normalidad.

La cacería de la bruja [¡Terminada!]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora