La cacería de la bruja [¡Terminada!]

Capítulo 43

Fue entonces que la vi, pensé que era un sueño, pero era realidad, fue un día común y no esperaba encontrarme con mi Elise en un largo tiempo, mucho menos en un puesto de comida.

Sin duda era ella. ¿Acaso soy tanto como para no reconocerla? Su voz, su olor, sus delicados y humectados labios rosas, ese rubor que se le forma inconscientemente cuando está avergonzada y siempre evita el contacto visual cuando miente, no podría ser otra persona más que mi Elise.

¿Realmente se va a casar? No parecía muy feliz por ello, por supuesto, soy el único que la puede hacer feliz, no olvido sus palabras.

"Si me casara me gustaría que fuera alguien como tú".

Cuando hablamos del matrimonio estabas tensa, pero cuando te quedaste en mi casa sonreías todo el tiempo, aún herida. Pudo haber sufrido físicamente pero no emocionalmente... Hasta que sea digno de tu amor espérame.

No sé qué hace ella en un lugar tan peligroso y mucho menos sé por qué escondía su apariencia, sólo sé que esa escoria de Noah Claden no sabe valorarte y mucho menos cuidar de ti.

—¿Entendiste? —Pregunta un soldado.

—¿Q-qué? Perdón. —Dice Keneth.

—Desde ayer andas por las nubes ¿Qué te trae tan distraído? ¿O es un quién?

—No es de tu incumbencia.

Entra un niño a toda prisa, mientras sudaba.

—Escuchen, esta vez no son 100 o 200 magos, ¡Son 600! Están frente al Puente del Sol, en lugar de atacar salvajemente están quietos. El capitán quiere que se preparen y luchen.

—No hay problema, mientras más se expongan, más mueren. —Dice Keneth Apretando su espada.

Noah está en el bosque con un gran número de magos listos a proteger la guarida por cualquier emergencia.

Y yo estoy a un extremo del puente, Noah no quería, pero luego de una apuesta de piedra, papel o tijera cedió, sé que acepta los retos porque al ser el protagonista masculino todo sale a su favor y nunca pierde, pero como ahora yo tengo mayor protagonismo claramente el destino me iba a ayudar.

Pero la condición es que debo estar en medio, nada de ir en la primera fila, que aburrido.

Los magos que nos reunimos hoy somos alrededor de 600, todos los magos de este reino que decidieron protestar, para proteger nuestra identidad usamos una túnica negra y una máscara sonriente.

Si los mágicos tienen el poder de nuevo, pueden surgir dos situaciones, la primera es que algunos abusarán de su magia y someterán a los humanos normales, la gente tendrá miedo y exigirán una especie de protección, por lo que tenemos el segundo caso de segregación, las personas que no tienen magia podrían ser excluidas de ciertos lugares y habrán lugares que para su propia protección serán solo para gente común... Yo quiero que haya libertad para todos y que todos convivamos con nuestras diferencias. Por ello estamos aquí pacíficamente, no somos salvajes ni causamos daños, no hacemos nada malo.

Poco a poco las personas se acercaron a nosotros, tenemos testigos, entre ellos escritores de periódicos.

Muchos magos están trabajando desde varios lugares de reino, crearán hologramas en el cielo para que toda persona de este reino lo pueda ver, ¿Por qué no otros reinos? No soy ambiciosa, de por sí un reino es grande, quiero alertar a los otros reinos, pero no atacarlos por el momento. No hay televisión en este mundo, pero si hologramas mágicos.

—Están a un kilómetro, vienen a caballo. —Dijo un mago a mi lado que rastreaba la ubicación de los guardias.

—De acuerdo. ¡Activen los hologramas!