Capitulo 101

37 4 1
                                    

—¡¿Su majestad?! —Dije sorprendida—. Me asustó... Lo que hizo fue peligroso.

—Lo sé, casi me quema la cara. —Bromeó.

Al menos no se lo tomó a mal.

—¿Qué hace despierto a esta hora? ¿Hay algo que le disgusta?

—Todo está perfecto, gracias, sin embargo, tengo el hábito de despertar para ir al baño, pero luego decidí salir y ver las estrellas. En todo el camino hacia Jurdy, estuve descansando entonces no tengo sueño en absoluto.

—Oh, ya veo. —Miré al cielo—. Está nublado, no se ve ninguna estrella.

—De hecho, si hay una, quizá pueda verla mejor apagando la llama.

Seguí su recomendación y apagué el fuego. Miré atentamente y pude ver una estrella pequeña.

—¡Ah es verdad! ¿Tiene algún nombre?

No sabía el nombre de estrellas en mi mundo, mucho menos sé en este.

—Se llama Elise.

—¿Eh?

—He leído libros de astronomía y recuerdo a la perfección cada uno de ellos, estoy seguro de que no se ha registrado esta estrella, entonces se llamará Elise.

¿Qué es esto? No sé cómo responder.

Levanté el dedo e hice una luz pequeña a la par en el cielo.

—Entonces esa será la estrella Alonso. Es especial, sólo se puede ver esta noche en toda la historia.

—Agradezco su gesto.

Luego de pasar tiempo a oscuras, mi vista se acostumbró un poco y miré que él sostenía una lámpara apagada. Al igual que yo, debió apagarse por el viento.

—Emperatriz, si todo resulta bien, no me involucraré en sus planes de expansión, sin embargo, si en algún momento necesita el apoyo de mi imperio, podría acceder casándonos.

¿Lo dirá de esta forma?

—Usted ya tiene una esposa principal, la emperatriz consorte, no estoy interesada.

—Discúlpeme si la ofendí.

—¿Cómo ofenderme? Sé muy bien que cualquier hombre puede enamorarse fácilmente y quererme como esposa, no es algo nuevo.

—No estoy enamorado, es político.

—Al comienzo nadie lo está. —Hice una leve reverencia—. Me iré primero, yo sí tengo sueño así que iré a descansar.

Él también se inclinó. —Buenas noches.

Antes de irme encendí la vela y me marché.

En uno de los pasillos, intercepté a Noah. ¿Otro despierto?

—¿Sin conciliar el sueño?

—No, me despertaron, al parecer alguien la vio caminar a la misma dirección que donde estaba el emperador, así que informaron. Iba a ir para asegurarme que todo estuviera bien.

—Bueno... Pasó algo, pero prefiero hablarlo por privado.

Noah miró a su alrededor y luego abrió una puerta.

—Es una habitación vacía. —Dijo—. Si es algo importante que debe ser hablado ahora...

—Puedo esperar a decirlo mañana.

—Oh... Está bien. —Abrió sus ojos y se sonrojó abruptamente—. Disculpe, todavía estoy somnoliento y no pienso claramente, casi provoco una situación que puede malinterpretarse.

La cacería de la bruja [¡Terminada!]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora