CAPÍTULO 125
Al día siguiente fui a la casa de Adam y Olivia quienes vivían a unos veinte minutos de distancia. Ella me recibió muy sonriente.
—Sam, hola. Pasa por favor. —me dió permiso.
—Hola, con permiso.
Fuimos a la sala donde tomamos asiento y pude ver algunas fotografías.
—¿Que te trae por aquí? —me miró un momento.
—Vine a visitar a mi amigo, lamento no haber avisado ¿Está?
—Si, bajará en un momento... —señaló las escaleras.
—¿Como va la vida de casados? —pregunté un poco curiosa.
—Bien... —se cubrió la boca —lo siento, no me levanté muy bien
—Entiendo —sonreí deduciendo el motivo y Adam bajó.
—¿Sam?
—Tu ángel llegó y con muy buenas noticias —me levanté para abrazarlo.
—No me digas nada, finalmente arreglaron las cosas con Tom... —me señaló con una sonrisa.
—Y no solo eso... —mostré el sobre y se sorprendió.
—No lo... —se detuvo —¡voy a llorar! —exclamó frotándome los ojos.
—Adam... —reí —obviamente estás cordialmente invitado, serás de los invitados más importantes. Quiero que seas mi damo de honor —bromé
—Que emoción, ¿Qué color de vestido me quedaría mejor? ¿Rosa? —siguió y reimos.
—Uno de los momentos más importantes de mi vida será pronto y creo que el tuyo también... —murmuré observando como Olivia se iba corriendo.
—Ha estado así los últimos días. —suspiró preocupado.
—Deberías pensar en nombres. —susurré y me miró sorprendido —futuro papá.
—¿Tu crees? —asentí y me abrazó emocionado —realmente eres un ángel, siempre me traes buenas noticias.
—No soy un ángel, solo sé observar —corregí señalándolo. —y ahora me voy...
—¿Estás nerviosa? Ahora sabrás como me sentí —rió.
—No, estoy bien y si cambio de ánimo será por tu culpa —nuevamente lo señalé acusando.
—Por favor.
—Nos vemos —me fui.
Otra semana pasó y el gran día se acercaba, pero aún debía hacer algo y quería hacerlo con Thomas.
—Mañana iré a California para entregar la invitación a Fred y Liam —dije mientras nos recostabamos y lo miré. —¿Quieres acompañarme?
—¿Quieres que vaya contigo? —asentí y sonrió. —De igual manera lo hubiese hecho.
Llegamos a aquella ciudad norteamericana y fuimos a mi departamento que permanecía impecable.
—¿Aquí estuviste todo ese tiempo? —miró con atención todos los rincones.
—Si, es demasiado, pero cómodo —suspiré.
—Es el doble de mi departamento —sonrió.
—No te sientas mal. —pellizqué sus mejillas —haré una llamada...
Tomé el móvil para marcar a Liam.
“El número con el que intenta comunicarse...”
—No hagas eso conmigo, lo aprendiste de mi. Eso no funcionará —lo interrumpí y lo escuché reír.
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CICATRICES [FINALIZADA ✓] |+18|
Novela Juvenil«"Dicen que las heridas sanan con el tiempo, pero las cicatrices perduran en éste".» Las palabras resonaron en mi alma, como un eco de mi propio pasado. Un pasado que parecía tan lejano, pero que aún me perseguía con sus fantasmas. -Jamás creí te...