Choco Milk Shake continuación Made in Spain [+18]

Capítulo 35.- No es normal (Abuela y amiga)

Aquella mañana, ni la abuela ni su amiga tenían un buen día. Ambas, fruto del tratamiento, estaban cansadas e irritables, y se sentían débiles y tristes.

Se encontraban en la sala común de la residencia varios abuelitos y sus cuidadores. El detonante la discusión pudo haber sido cualquier tontería, pero tocó que fuese un tema tan delicado como la homosexualidad.

La abuela sabía perfectamente que la gente de su generación tenía muchos prejuicios al respecto, aunque, en cierto modo, podía entenderlo. Quizás lo triste fuese ver a gente joven con esos mismos prejuicios de antaño.

Por fortuna, de estos últimos no había muchos, y de los miembros de su quinta, había honrosas excepciones que tenían una mente más abierta y podían entender y respetar a todas las personas, sin importar sus preferencias.

La amiga de la abuela, por desgracia, no estaba en este grupo.

En este tema, ya estaba la abuela acostumbrada a lidiar entre el falso puritanismo, "es que no es normal... es pecado, es puro vicio... están corrompiendo a los más jóvenes"; la podrida superioridad moral, "pobrecitos, han nacido así, tienen esa enfermedad"; o la homofobia abierta, "me dan mucho asco".

La abuela aguantaba estoicamente todas las frases y comentarios, del debate que se había generado en el salón esa mañana, pero su entereza se resquebrajó en cuanto vio entrar a su nieto y a Choco.

—A mí que digan lo que quieran... —dijo la amiga de la abuela— ¡Pero eso no es normal! ¡No son normales!

—¡Basta! —gritó encendida la abuela— ¡¿Por qué no te callas?!

—¿Por qué te enfadas?! Es verdad lo que dicen, ¿no? Que tu nieto es... "de esos"

JungWoo palideció. Acababa de entrar con Choco por la puerta y la amiga de la abuela estaba sentada justo de espaldas a ellos, por lo que no pudo notar su presencia. Traían una bolsa de golosinas, como hacían con frecuencia, para repartirlas entre todos...

—¡Cállate! ¡No hables mal de mi nieto!

—¡Todos lo saben! A tu nieto le gustan los hombres, siempre va con ese amigo suyo... Y el otro día les vieron... ¡dándose la mano!

JungWoo, desde la entrada, levantó las manos, indicándole a su abuela que se calmara, que detuviera la discusión, pero ésta no hizo caso.

—¿Y a ti qué más te da? ¿En qué te afecta?

—¡No es normal! No es lo correcto. Alguien así... ¿Cómo puede tener tan poca piedad filial?

—¡¿Poca piedad filial?! ¡Mi nieto viene a cuidarme siempre que puede! Se preocupa por mí, me atiende, me asiste, y se desvela porque no me falte nada... ¿Cómo te atreves a decir que no tiene piedad filial?

—¡Porque no continuará con la línea familiar!

—¡Claro! Como si no hubiera parejas 'normales' que no quieren tener hijos y no van a continuar con la línea familiar...

—¡Es que entre ellos no pueden! No pueden tener hijos... ¡Estarán solos! ¿Quién los cuidará en el futuro? ¿Quién los atenderá? ¿Quién se preocupará por ellos?

—Y... ¿Quién se preocupa por ti? —dijo la abuela lanzando una flecha emponzoñada con la frustración de sus palabras. Su amiga se quedó helada— Es que tener hijos y familia no te garantiza que te cuiden el día de mañana cuando lo necesites... ¡Tres hijos que tienes! Y tantos nietos... ¡Y ninguno está aquí para cuidarte! ¡Nadie te acompaña! ¡No se preocupan por ti! ¡Tú sí que estás sola! ¡Siempre estás sola porque no te aguantan!