Choco Milk Shake continuación Made in Spain [+18]

Capítulo 77.- Te he echado de menos (JungWoo y Choco)

JungWoo y Choco, después de su gran aventura, por fin volvieron a casa.

—Deberíamos avisar a todos de que hemos regresado... —dijo JungWoo cogiendo el teléfono, pero Choco lo detuvo.

—¿No podríamos... esperar un poquito más para avisarles?

—¿Por qué?

—Bueno... justo ahora... caigo en la cuenta de que podemos tener un rato a solas. Un rato en el que nadie nos molestará...

JungWoo empezó a entender a qué se refería y giró el rostro, ocultando su sonrisa.

—¿Ah sí? —dijo haciéndose el inocente— ¿Y para qué querríamos un rato a solas?

Choco lo abrazó de espaldas, apoyando la cabeza en su hombro y quedándose con las mejillas pegadas.

—Sólo quiero estar contigo. Te he echado mucho de menos...

—Yo también te he echado de menos... —dijo JungWoo girándose y dándole un suave beso en los labios.

—JungWoo... —dijo Choco, intentando abrazarlo y tomar la iniciativa, pero JungWoo lo detuvo.

—¿Recuerdas el día que llegaste?

—¿La segunda vez...? —preguntó Choco, mientras sus orejas se ponían considerablemente rojas.

—Sí...

—Lo recuerdo... vagamente.

—Permíteme que te refresque la memoria —dijo JungWoo, con una mirada lasciva—. Esta vez, déjame hacer a mí, ¿entendido?

—Sí...

JungWoo condujo a Choco hasta la cama. Le desabrochó lentamente la camisa de color crema que llevaba, y la deslizó por sus brazos, dejándole vestido sólo con sus pantalones oscuros y ceñidos.

—Ponte esto —le pidió extendiendo en su mano una bandita del pelo, esponjosa y aterciopelada, de color rosa y blanco, de las que se utilizan para retirar el cabello cuando se usan mascarillas faciales.

Choco la miró y de la manera más inocente e ingenua posible se la puso en el pelo.

—Choco... en los ojos. Que te la pongas en los ojos... —le indicó riéndose.

—Pero yo quiero verte... me gustas...

—Vamos, cierra los ojos y cúbrelos. Jugaremos un rato —le pidió con una voz tan seductora que Choco ya estaba más que emocionado.

Dirigiéndolo, lo tumbó en la cama, boca arriba, con los ojos tapados. Sin hacerle esperar demasiado, de un salto, se sentó a horcajadas encima de él, aún sin desvestirse.

—JungWoo... —dijo Choco conteniendo un jadeo.

No sabía qué hacer, JungWoo no solía tomar la iniciativa de esa forma, así que sólo intentó controlar las ganas irrefrenables que sentía de hacerlo suyo.

Sin mostrar ningún recato, JungWoo comenzó a frotarse contra el pantalón de Choco, en suaves movimientos de vaivén que estimulaban y aumentaban su deseo. Ambos podían notar los bultos que se marcaban intensamente en sus partes bajas.

JungWoo continuó besando y lamiendo el cuello de Choco, mientras sentía como su respiración se agitaba.

—JungWoo... si continúas haciendo esto...

—¿Qué? Si continúo... ¿qué harás? —dijo juguetón.

—No sé si podré resistir mucho tiempo así —le advirtió.