Veintinueve

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Veintinueve

―Porsche Kittisawasd, treinta y cinco años, nacido el...― Kinn leyó el informe que envió el investigador, a pesar de todo el trabajo pendiente no pudo posponer más el enfrentarse a la verdad. En aquella oficina de uno de los edificios más altos y lujosos de Bangkok, un Alpha que ha cometido muchos errores inicia su camino para reconocer sus faltas y aceptar su responsabilidad. El archivo digital contiene los datos personales de Porsche, datos que él conoce de memoria, todos esos años buscando hicieron que grabe hasta el nombre de la mascota que alguna vez tuvo cuando era niño.

«Dirección actual: Callejón Thawi Choet Chu, 762 Bangkok»

Tan pronto como los ojos de Kinn dieron con la dirección de Porsche su cuerpo se congeló y un escalofrío recorrió su cuerpo, si conduce en ese momento podrá llegar ahí en menos de una hora, Porsche estuvo todo ese tiempo tan cerca de él y nunca lo encontró. Su corazón se volvió pesado y necesitó respirar profundamente antes de continuar. Aquel informe fue ordenado en orden cronológico, en esas páginas hay dieciséis años de separación y dolor, de sufrimiento para Porsche y de un padre ausente para su hijo, no puede huir más de la verdad, así que tomando todo el coraje que le faltó cuando era joven, continuó leyendo.

Cuando Porsche salió de la casa de los Theerapanyakul se fue sin llevarse nada, lo hizo en silencio y su atención estaba puesta en cumplir con el plan que tramó Khun, el destino era incierto y el miedo a fracasar lo hizo querer regresar un par de veces a medida que el taxi avanzaba al aeropuerto, sin embargo, cuando tocaba su vientre se llenaba de determinación y se sobreponía al dolor de la traición y al amor que su corazón sentía por Kinn. La primera semana después de dejar a Kinn resultó un infierno, no supo cuantas veces lloró, apenas comía y su instinto le gritaba que volviera con su Alpha, después de todo, la marca los une y no importa cuantas personas lleve a su cama, él es su Omega por vínculo.

Los sirvientes cuidaban bien de él y Khun intentaba consolarlo, incluso llevó alguna prenda usada de Kinn para que Porsche pudiese tener algo del aroma del Alpha, además del corazón roto todavía es un Omega en el primer trimestre del embarazo y necesita sentir que su pareja está a su lado para hacer que la gestación no sea tan complicada. Una semana después y en un estado de depresión Porsche fue arrastrado por Khun al hospital para hacerse el control de embarazo y pedir una solución para la necesidad constante de feromonas del padre de su hijo, la ciencia puede avanzar mucho, pero, todavía el instinto prevalece y un embarazo sin complicaciones se logrará con el acompañamiento del padre a la madre.

―También quiero bloquear el vínculo― pidió Porsche al médico, para Khun fue natural que quisiera hacerlo, Kinn se comportaba tan agresivo en casa que lo mejor sería mantenerlo lejos de Porsche y del bebé.

―No podemos bloquearlo por ahora, solo puedo ayudarlo a que la otra persona no obtenga información suya, pero, si él quiere comunicarse por el vínculo con usted todavía lo podrá hacer aún si no obtiene respuesta, los medicamentos que bloquean el vínculo por completo pueden dañar al bebé, así que debemos esperar― explicó y Porsche respiró agotado, en esos días los malestares del embarazo aumentan y solo puede soportarlo por su naturaleza dominante, sin embargo, esos días se ha encargado de bloquear el vínculo sin ayuda de ningún medicamento y está tan agotado que no puede continuar.

―Hagamos eso, no quiero que sepa de mí y del bebé― pidió Porsche soportando el nudo en su garganta al saber que a partir de ese momento se despedirá para siempre de Kinn.

El tiempo pasó y Porsche mejoraba, los cigarrillos de feromonas que creó el hospital para él mejoraron mucho sus malestares y el medicamento de feromonas Beta creó una barrera temporal donde el Alpha no se enteraría de nada de lo que sucede su Omega. El primer mes transcurrió y cuando estaba por llegar al cuarto mes una noche sintió que alguien tiraba del vínculo. Kinn decía que era su juguete y no le importaba sus sentimientos, ya tiene a un amante en casa ¿por qué molestarse en tirar del vínculo? Al principio parecía que lo hizo sin intención y cuando Porsche volvía a intentar dormir Kinn lo hizo otra vez, esta vez se sentía la agresividad y el enojo, también los instintos asesinos del Alpha.

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